El primero en llegar fue el PowerEdge 850, y mis empleados se enamoraron rápidamente de él. Esta es casi una máquina para un usuario, pero aun así tiene todas las sutilezas que esperaría de las cajas de soporte Dell, incluyendo controles KVM en la parte frontal y posterior, compatibilidad universal con monturas de 19 pulgadas, el interruptor de poder “diferido”, un reproductor de DVDs puesto en la parte del frente, y un ventilador interior enorme y ruidoso. Esta última característica puede obligar a los compradores a mantener al 850 fuera de una oficina PyME, ya que el nivel de ruido está realmente diseñado como para un closet dedicado a servidores o para estar en un datacenter. Afortunadamente, esto no nos molesta; tarde se nos hacía para quitar la envoltura. Lo hicimos casi en cuestión de segundos, y muy pronto el 850 estuvo colocado en nuestro APC NetShelter de tamaño medio. El PowerEdge 830 es definitivamente la máquina más orientada a las oficinas pequeñas o las oficinas en cada (SOHO). Es una caja torre que tiene pequeñas diferencias cuando es comparada con una estación de trabajo, a excepción del revelador silbido de su poderoso ventilador. Pero eso es sólo cuando el sistema arranca, porque después de eso, se establece un agradable susurro. Ambas máquinas Dell llegaron equipadas con un CPU de núcleo doble Intel Pentium D 840 corriendo a 3.2GHz con caché de 2MB integrado. Ambas tenían 1GB de memoria RAM instalada para nuestras pruebas. De cualquier manera, el 830 puede manejar hasta 4GB y el 850 puede llegar a los 8GB de RAM. Esta diferencia, y el hecho de que el 850 es deliberadamente anémico en lo que se refiere a espacio de disco (el 830 tiene tres discos de 150 GB Maxtor UltraSCSI en una matriz RAID 5, mientras que el 850 llegó con apenas un disco duro de 80GB y espacio para uno más), ilustran la verdadera identidad del 850. Este pequeño montado en estante hace una doble labor de componente de nivel de entrada de un usuario para instalaciones computacionales de grid o agrupada con otros equipos (cluster). Más allá de contribuir a esa visión, el 830 y el 850 están certificados con Linux. Las dos máquinas incluyen la más reciente versión de OpenManage Server Administrator de Dell, la 4.3. Server Administrator aún gira en torno al monitoreo de servidores específicos, basado en Web, pero también se integra a la más rica infraestructura de administración OpenManage. Sin embargo, el juego completo no está disponible sin costo con la compra de cada servidor, lo que sí ocurre con el Server Administrator. Sin embargo, la mayoría de las PyMEs estarán muy satisfechas con Server Administrator. Los diagnósticos son sorprendentemente detallados, y me llevó a una configuración RAID –o mejor dicho, re-configuración– de una interfaz de usuario dedicada. Inclusive puede usar el disco de instalación de OpenManage como una especie de disco de arranque de emergencia, que arrancará como Linux si se deja en el drive durante el reinicio. Las PyMEs necesitan este tipo de funciones de administración de servidor tanto como una empresa grande: sólo porque tenga pocos recursos no quiere decir que sus servidores no fallarán. De hecho, es peor para usted si no tiene muchos recursos y su servidor falla, porque en ese caso probablemente sólo tendrá uno, en lugar de los estantes y más estantes de repuestos como pueden tener las grandes empresas. Tener herramientas de administración empacadas es una parte crítica de un producto de servidor orientado a las PyMEs, y marca una gran diferencia entre los servidores Dell y Gateway: Donde la administración de Dell cubre las bases, la de Gateway tiene únicamente lo más básico. Gateway asume que la compañía tendrá su propio producto de administración de servidor –pero esa es una suposición para empresas grandes, no para las PyMEs. Para las PyMEs que tienen cuartos de servidor y aplicaciones de servicio de alto desempeño, el 850 puede servir para comenzar, como equipo para un usuario de nivel de entrada y de propósito general que luego puede ser rápidamente configurado para ajustarse en ambientes de agrupamiento de máquinas (clustering). Pero si lo necesitas para un servicio diario de archivos PyME fuera del datacenter, el 830 es tu mejor apuesta. Dicho esto, una cosa que nuestro 850 tenía y el 830 no, es la tarjeta de acceso remoto de Dell. Este complemento viene como estándar con la versión avanzada del 850 y permite un control de administración casi total del servidor vía remota. La tarjeta se comunica con el controlador de administración integrado del 850 para no solo enviar alertas de salud física sino para proporcionar a un ingeniero remoto una variedad de herramientas de diagnóstico como, SSH y acceso Telnet, soporte SNMP, soporte Virtual Media, y hasta una consola remota interna si todo lo demás falla. Esta es ciertamente una función más orientada a los datacenter que la mayoría de las operaciones SOHO podrían requerir, así que su omisión en el 830 es de esperarse. Desempeño de doble núcleo Después de echar a andar cada servidor, decidí probar las máquinas con CPU de doble núcleo para encontrar dónde había en verdad un aumento notable en el desempeño para las tareas de uso intensivo del CPU. Para hacerlo, introduje DMark, un benchmark personalizado que diseñamos hace varios años como parte de una prueba de base de datos relacional. La prueba está escrita en 1005 Java y requiere un JVM en todas las máquinas cliente. Reescribí nuestras consultas de bases de datos y las sustituí con varios hilos de cálculos fractales complejos; la esencia de DMark recae en el tiempo que le toma a un producto llevar a cabo estos cálculos. Para hacer la comparación, usé una estación de trabajo HP dual Pentium 4 2.8GHz (de núcleo sencillo), y ejecuté DMark en las tres máquinas. Los resultados fueron como se esperaba, con el Gateway de 2.8GHz atrasándose un poco de las Dell de 3.2GHz. Sin embargo, cuando se compara con el HP de doble CPU, el Pentium D realmente mostró sus detalles, venciendo a HP por casi 30% en tres pruebas. De acuerdo, las tareas de uso intensivo del CPU son algo raro en un servidor de archivos de propósito general de una PyME, pero es bueno saber que los músculos y la longevidad estarán ahí en el momento en que los necesite. Cualquiera de estas tres máquinas haría un trabajo sólido para la mayoría de las funciones que suelen llevarse a cabo en las PyMEs. El PowerEdge 850 puede ser el menos apropiado para un verdadero ambiente PyME, ya que su segunda identidad está definitivamente orientada a ser parte de un cluster. El PowerEdge 830 eclipsa al Gateway no sólo en términos de software administrativo integrado sino también en términos de precio, pues su costo es de casi $1,000 dólares menos que el del E-9220T. Sin embargo, si no necesita herramientas de administración de servidor de alto nivel, el E-9220T es una sólida –aunque ligeramente costosa– equipo que soporta una buena parte de carga para las empresas pequeñas y medianas.