Gracias a las redes de alto rendimiento que se vienen preparando desde hace años para funcionar sin problemas y llegar a todos los rincones de nuestra región, los aficionados desde sus casas pueden ver cada partido de Catar 2022 sin perderse los “golazos” de las estrellas como Lionel Messi o Cristiano Ronaldo.
En comparación con la Copa Mundial de 2018, el evento de este año contará con dos diferencias claves que lo convertirán en una experiencia única para todos los espectadores, ya sea desde su casa o en persona: la llegada de 5G y el aumento exponencial de la capacidad del sistema de cableado submarino. En los últimos cuatro años, las redes se han transformado para alcanzar velocidades ultrarrápidas de hasta 800Gb/s por canal, frente a los 400Gb/s de la Copa Mundial de 2018. Cuando se inaugure el evento en el estadio Al Bayt el 20 de noviembre, más del 40% de los 5 mil millones de espectadores previstos estarán conectados a servicios de streaming a través de sus televisores inteligentes, tabletas, computadoras y teléfonos inteligentes. El rendimiento de la red les permitirá ver cada uno de los goles de sus jugadores favoritos en el campo prácticamente en tiempo real.
Un balón que rueda por el fondo del mar
Según TeleGeography, en los últimos cuatro años, la capacidad de transporte de datos por cables submarinos en América Latina ha aumentado a un ritmo del 30% anual debido a la llegada de 19 sistemas de cable. Esto es importante porque más del 95% de la conectividad mundial depende en gran medida de los más de 400 cables submarinos actualmente en funcionamiento, que se extienden sobre más de 1,3 millones de kilómetros.
Para entender mejor el papel fundamental que desempeñan los cables submarinos para nuestra región, vamos a sumergirnos en el recorrido que harán los datos desde Catar. Cuando las cámaras graben el primer gol del partido, el vídeo capturado, las repeticiones, el audio y las estadísticas, estos se transmiten a los centros de datos en cuestión de milisegundos para ser procesados. Luego, estos datos se reenvían a una estación de aterrizaje de cable submarino cercana para eventualmente terminar transportándose a través un cable submarino transatlántico de alta capacidad hasta América Latina. Después atraviesan las redes terrestres hasta llegar a los centros de datos cercanos de la región que envían ese primer “golazo” a los dispositivos de cada uno de los espectadores.
La evolución de la tecnología de redes hace posible una mejor calidad general de la experiencia de los consumidores. El sector –los operadores de cable y de redes, así como también los proveedores de Internet y de contenidos– en América Latina ha estado preparando sus redes para una demanda significativamente mayor de datos, lo que permite una mejor experiencia de visualización. La demanda de transporte de datos con mayor capacidad y menor latencia seguirá aumentando en todo el continente para grandes eventos como la Copa Mundial y los Juegos Olímpicos, así como también el continuo aumento del uso cotidiano de Internet y los servicios de streaming.
El futuro de la Copa Mundial
Según GSMA, en términos de conectividad, Catar se encuentra en una muy buena posición, ya que es uno de los seis países en los que la 5G cubre más del 80% de la población. Si bien esto significa que el país cuenta con la infraestructura necesaria para darles acceso a Internet de alta velocidad y capacidad a los visitantes, también significa que veremos, por primera vez, cómo la nueva tecnología realzará la experiencia de ver la Copa Mundial. Además, según Digital TV Research, se espera que los suscriptores de vídeo bajo demanda aumenten de 42 millones en el 2016 a 116 millones en el 2026. Por lo tanto, las empresas de toda la región están empezando a invertir en la tecnología necesaria para utilizar experiencias virtuales, como el metaverso, lo que cambiará el mundo del deporte.
Con la próxima Copa Mundial que se celebrará en México, Canadá y Estados Unidos en el 2026, los avances tecnológicos que se avecinan son emocionantes para la región latinoamericana. De cara al futuro de la red, se espera que la Copa Mundial de 2026 sea el primer año en el que los aficionados puedan disfrutar la Copa Mundial de una manera diferente al estar totalmente inmersos en el metaverso.
Aunque algunos aficionados no puedan asistir a un partido presencial en Catar, en pocos años, las nuevas tecnologías, junto con la adopción generalizada de 5G y el aumento de la capacidad de los cables submarinos, ayudarán a replicar la sensación de estar en el estadio desde la comodidad de su propio sofá. Será un hito para un evento de esta magnitud.
Por: Carlos Hernández, Director Senior de Ventas Regionales, Ciena