En un contexto en el que las empresas de Latinoamérica se muestran proclives a experimentar y a innovar y en que la infraestructura digital de la región se vuelve más robusta, crece la adopción de tecnologías emergentes: el 90% de los ejecutivos encuestados por NTT asegura que incrementará su inversión en este segmento en los próximos doce meses.
El dato se desprende del estudio Impulsar la adopción de tecnologías emergentes en América Latina, realizado por Harvard Business Review Analytics Services y patrocinado por NTT DATA. La investigación que se realizó entre 316 ejecutivos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú y México, se centra en la realidad de la región y aborda diferentes ejes, entre ellos, impacto en los negocios de las tecnologías emergentes, cuáles son las más adoptadas, con qué objetivos se implementan, cuáles son los obstáculos para su incorporación y quiénes son los responsables estratégicos que toman la decisión de adoptarlas.
Una de las conclusiones destacadas es que tanto los resultados alcanzados hasta el momento como la perspectiva de cara al futuro con la adopción de estas tecnologías resultan positivos. En efecto, el 90% de los participantes considera que las tecnologías emergentes aportan al éxito de sus organizaciones en el futuro, un 87% afirma haberles sacado provecho en los últimos dos años y 88% considera que los beneficios obtenidos justifican el monto de la inversión, con mejoras en la reputación de marca, el incremento de ingresos y de rentabilidad o la retención de clientes como algunos de los puntos más relevantes.
La computación de borde (edge computing) es la tecnología emergente más utilizada por organizaciones de la región, con una adopción del 65%. Le siguen la biometría (63%), la robótica avanzada 60%), la realidad virtual y aumentada (56%), 5G (55%) y la inteligencia artificial (54%). Unos escalones más abajo aparecen blockchain y las monedas digitales (49%) y el metaverso y la computación cuántica, ambas con 45%.
Respecto de qué motiva a las organizaciones a implementar estas tecnologías, predomina uno de los desafíos clásicos del tejido empresarial latinoamericano: la necesidad de incrementar la productividad, presente de manera directa en la mitad de las respuestas.
Desde el punto de vista de los obstáculos, los más relevantes son la escasez de talento y la falta de experiencia y el déficit de competencias (73%). Otras barreras son la dificultad para integrar las soluciones en la infraestructura de TI existente (34%) y la falta de recursos financieros para invertir en formación o en las propias tecnologías (31%).
¿Es posible esquivar estas complicaciones? Para el 88%, buena parte de la solución consiste en elegir el socio tecnológico adecuado. Para otro 86%, es fundamental además desarrollar una cultura corporativa apoyada en la innovación.
En términos de liderazgo, las áreas de TI continúan siendo clave en la identificación de las soluciones que mejor se ajusten a los objetivos estratégicos de la organización: en el 65% de las empresas la decisión de los proyectos pasa por las manos de los ejecutivos de c-level de esa área. Sin embargo, crece el involucramiento de los directivos de más alto rango, como presidentes, CEOs y directores generales, y ya alcanza casi la mitad de los casos.
“El principal aporte que entrega este informe es que a diferencia de lo que ocurre en general, con los estudios de este tipo enfocados en regiones como Europa, Norteamérica o Asia-Pacífico, nos permite entender la realidad de Latinoamérica”, señaló Alberto Otero, Head of Americas Digital Technology, NTT DATA EMEAL. “En una época en que todas las empresas están convirtiéndose en negocios digitales, mantenerse a la vanguardia y adoptar tecnologías emergentes es sinónimo de afrontar los desafíos que depara el futuro en términos de productividad, competitividad, crecimiento y resiliencia y lo que estamos viendo con una gran satisfacción es que las empresas latinoamericanas no sólo están haciendo crecer sus inversiones en este sentido, sino que, lo más importante, tienen cada vez más desarrollado el gen innovador en su cultura”, concluyó.
“Para las empresas que buscan competir en un entorno casi completamente digital, mantenerse a la vanguardia significa aprovechar las tecnologías emergentes para apoyar la innovación y creación nuevos modelos de negocio. Por ello, las organizaciones latinoamericanas están adoptando las tecnologías emergentes para reinventar la estrategia de negocio, los procesos empresariales, impulsar la eficiencia y mejorar la experiencia de cliente mientras invierten en su futuro”, declaró Juan Carlos Montero Vilchis, Head of Digital Technology en NTT DATA EMEAL.