
Por Javier Farrera, TCIS, Services Practice Lead de Unisys México
Ya que las tabletas continúan abundando en el lugar de trabajo, las organizaciones de TI tienen un gran reto: dar a los usuarios un fácil acceso a las aplicaciones corporativas e información comercial requeridas para desempeñar las labores de los diferentes puestos, manteniendo al mismo tiempo la seguridad del activo y la integridad de las transacciones. Si bien este desafío es de enormes proporciones, no es insuperable.
De hecho, un CIO puede llevar a cabo exitosamente un programa de manejo de tabletas, centrándose en cuatro prácticas fundamentales.
1. Basar la política desde la perspectiva del usuario final. Para desarrollar una política racional, primero se debe entender cómo los empleados utilizan las tabletas en el trabajo. Es fundamental identificar los escenarios de uso encuestando en línea los empleados sobre los diferentes usos que le están dando a las tabletas. Comprendiendo la gama de cuestiones que se enfrentarán, se tendrá que actuar conforme a las expectativas de los trabajadores sobre el acceso a los recursos corporativos, las vulnerabilidades de seguridad potenciales, las expectativas del curso y soporte remedial de TI; se pueden alinear sus recursos de soporte y soluciones de manera proactiva. Al mismo tiempo, se deben aprovechar los métodos de colaboración, tales como bases de conocimiento, los cuales están acostumbrados a usar los trabajadores de la información.
2. Invertir en una solución de Administración de Dispositivos Móviles (MDM). Implementar un plan dentro del ciclo de vida de gestión de los activos de TI para dar cuenta de los dispositivos móviles, desde la solicitud hasta su reposición, así como otros elementos como planes de telefonía y datos. Esto además de dar un punto de vista de los costos, proporcionará un método para el apoyo, desde el diagnóstico a distancia hasta la gestión proactiva del rendimiento. Estas soluciones también ponen firmemente en el camino correcto la implementación de una seguridad punta a punta de los datos, dispositivos, aplicaciones empresariales y la red.
4. Desarrollar Programas piloto. Los programas piloto bien planificados, diseñados y con plazos definidos, son ideales para medir la efectividad potencial de una nueva iniciativa propuesta para la gestión de tabletas. Se pueden utilizar para hacer los ajustes antes de extender el programa a todo el personal.
Por encima de todo, la exitosa gestión de las tabletas en la empresa requiere de un cambio de actitud de parte del personal de TI. Los métodos tradicionales de arriba hacia abajo no funcionan para controlar una directriz iniciada por los usuarios. En última instancia, el entusiasmo de los empleados por contar con un acceso flexible a las herramientas de productividad y los recursos corporativos que requieren para sus labores será el factor primordial en la formación de las políticas de TI. Las necesidades de los usuarios deben ser el marco de referencia para cualquier tipo de estrategia estable para una gestión mirando hacia el futuro orientada a las tabletas.