La venta de Dell por $24,400 millones de dólares, tras 25 años en Bolsa, convierte al fabricante TI en compañía privada, y le libera de las presiones de los accionistas. Una operación que HP está dispuesta a aprovechar para atraerse a los clientes de Dell.
“Dell tiene un difícil camino por delante”, afirma HP en un comunicado. “La compañía se enfrenta a un amplio periodo de incertidumbre y transición que no será positivo para sus clientes. Y al hacer frente a una deuda significativa, su capacidad para invertir en nuevos productos y servicios se verá muy limitada”.
Dando un paso adelante más, en su comunicado HP anima además a los clientes de Dell a sumarse a su comunidad. “Las compras tienden a dejar a los clientes al margen de la innovación. Creemos que los clientes de Dell estarán ansiosos por explorar otras alternativas, y HP quiere aprovechar esta oportunidad”.
Otros fabricantes de PC como Lenovo y Acer de momento han optado por guardar silencio sobre la conversión de Dell en compañía privada.
El comunicado de HP ha causado sorpresa en el mercado puesto que son conocidas las dificultades con que el fabricante lucha por mantener su posición en el negocio de PC durante los últimos años. De hecho, el pasado martes aparecieron informaciones que daban por seguro que el comité directivo de la compañía podría estar considerando de nuevo la división de su negocio. No sería la primera vez; ya en el 2011 HP evaluó durante algún tiempo la posibilidad de separar sus actividades en el mercado de PC en una compañía independiente. Finalmente, esa opción fue desechada pero, tal como hoy está haciendo HP, Dell rápidamente consideró que ese periodo de indecisión representaba una oportunidad para su compañía.
Transición e incertidumbre
La venta de Dell es para Christian Perry, analista de Technology Business Research, “un reflejo perfecto de la transición que está atravesando el mercado de PC, que está generando mucha confusión. Por ello resulta ciertamente irónico, aunque no sorprendente, que los competidores de Dell interpreten la operación como un movimiento incierto. Todos los mercados de PC se encuentran sumidos en la incertidumbre en alguna medida”.
La desestabilización de la industria de la PC ante el auge imparable de smartphones y tablets empuja a cada fabricante a pelear por hacerse con los clientes de los competidores, incluso lanzando duros ataques directos.
“El primer bombardeo de HP contra Dell ha sido realmente feroz”, afirma Dan Olds, analista de Gabriel Consulting Group. “No creo que esta clase de ataques ayuden a HP en el mercado, pero muestra que está haciendo todo lo posible para sacar ventaja de la situación”. Sin embargo, Olds cree que no le será fácil puesto que muy probablemente Dell esté preparado para luchar por conservarlos.
Mikako Kitagawa, analista de Gartner, asegura que “para Dell el reto será mínimo puesto que su transformación afectará menos a sus negocios corporativos a corto plazo. En el negocio de consumo, los distribuidores de la compañía sí deberían moverse con prudencia, pero este segmento no será la principal fortaleza de Dell”.