La industria de las telecomunicaciones en América Latina está posicionada para un crecimiento continuo en 2012, a pesar de las difíciles condiciones económicas mundiales, estimó Standard & Poor’s (S&P).
En un reporte, la calificadora espera que el crecimiento del sector se atenúe en relación con 2011, como resultado de una menor tasa proyectada del Producto Interno Bruto (PIB) para la región este año, de 3.5 por ciento.
Sin embargo, aclara, la mayor demanda de servicios de banda ancha fija y móvil y el aumento potencial de minutos de uso para el segmento de telefonía celular deberían aumentar los ingresos.
Los avances tecnológicos y la evolución de los teléfonos inteligentes estimularán también el crecimiento en los próximos años, en especial a medida que aumente la competencia entre proveedores y los fabricantes ofrezcan equipos más baratos.
“Esperamos que los participantes dominantes en la industria de telecomunicaciones obtengan un desempeño operativo fuerte este año, con márgenes operativos de más de 30 por ciento”, dijo la analista crediticio de S&P, Marcela Dueñas.
Por otro lado, estima que las empresas más pequeñas orientadas a la telefonía de larga distancia y a sectores de nicho mostrarán una debilidad continua en sus resultados financieros.
La evaluadora internacional de riesgo crediticio señala que la expansión de la banda ancha móvil continuará siendo una tendencia importante este año, a medida que el número de conexiones inalámbricas se acerca al de las conexiones fijas.
Las mejoras a la red 3G en toda América Latina también dará forma a la industria, en tanto se espera que los suscriptores al sistema de señal de satélite directa al hogar (DTH, por sus siglas en inglés para direct-to-home) crezcan a una tasa de doble dígito este año, porque es un servicio más accesible en cuanto a precio, señala el reporte.
Refiere que otra área a observar es el desarrollo de la banca móvil, en especial después de la coinversión entre Telefónica y MasterCard.