¿Usted se considera un CIO rudo o técnico? Un técnico conoce a detalle cómo funciona un servidor, qué código se utiliza para desarrollar una base de datos in-house, y cuánto tiempo lleva respaldar las transacciones del día. Un rudo cuenta con gran capacidad de planeación, negociación y manejo de su equipo de trabajo. Ambos pueden encontrarse en todas las industrias y sectores productivos en el mundo; y hay quienes prefieren tener a un técnico al frente de sus proyectos tecnológicos, mientras que otros se sienten más cómodos con un rudo que tenga una perspectiva más estratégica del negocio. Hace poco me leí un artículo que cuestionaba si era necesario tener antecedentes técnicos para dirigir un departamento de TI en una empresa. La conclusión a la que se llegaba era que no necesariamente. Aseguraba que un ejecutivo que no tuviera antecedentes técnicos podrías llegar a ser un gerente de TI exitoso, aunque, por supuesto, ayudaba entender los bits y bytes del campo de trabajo del equipo. Destacaba también la importancia de conocer las capacidades técnicas de su personal y establecer un canal de comunicación directo entre el CIO y su equipo. Sin duda, una de las mejores armas para un líder de TI es saber con qué capacidades cuenta para asignar recursos y programar periodos de tiempo razonables para completar un proyecto. Si bien los especialistas técnicos deben dominar su especialidad para ayudar al buen desempeño del departamento de TI, el CIO no necesariamente debe tener saber paso a paso cómo realizar una actividad técnica. Por el contrario, lo importante para él es entender las tecnologías que se utilizan para satisfacer las necesidades del negocio, y cómo se asocian con los proyectos y las responsabilidades de los distintos departamentos de la empresa. De acuerdo con una encuesta reciente, la mayoría de los empleados de los departamentos de TI señalaron que la capacidad de un CIO para manejar a su gente es mucho más importante. De hecho, se ha demostrado que cuando al personal se le da la libertad de resolver problemas, diseñar aplicaciones o realizar cualquier otro trabajo, sin tener que dar cuenta de los detalles técnicos, genera resultados mucho más satisfactorios para la empresa. Son cuatro las capacidades gerenciales que los CIOs deben tener. En primer lugar está la comunicación; los líderes en TI deben contar con la capacidad de escuchar y trabajar con otros departamentos al igual que con sus colaboradores. Asimismo, deben reconocer y respetar las capacidades que los empleados aportan y tener la confianza de que realizarán las tareas que se les asigna. Deben también establecer y manejar las expectativas del departamento a su cargo; esto es, ayudar al personal a priorizar proyectos y a administrar la disponibilidad de los recursos. Y finalmente, apoyar y abogar por su equipo; un CIO representa los intereses de su equipo con la alta dirección, negocia plazos realistas y obtiene los recursos necesarios. Aunque estas capacidades pueden parecer obvias, la combinación de éstas siempre es bienvenida por una organización. Particularmente, en el mundo de las TI donde la demanda de personal es muy alta, un buen jefe debe saber cómo equilibrar la carga para hacer las cosas sin agotar a su equipo de trabajo para terminar un proyecto. Asimismo, debe ayudarle a entender y satisfacer las necesidades de los clientes, y relacionarse con la gente que puede ayudarle a hacer su trabajo, dentro y fuera de la empresa. Sea técnico o rudo, las empresas requieren líderes capaces de reaccionar rápido ante los cambios del mercado, de satisfacer las necesidades del negocio y poder aprovechar sus recursos humanos y técnicos para alcanzar el tan anhelado alineamiento de la tecnología con el negocio.