Análisis de datos, una nueva ventaja competitiva para el negocio

El uso constante de herramientas tecnológicas ha llevado a que las empresas recolecten de forma constante grandes volúmenes de datos relacionados con sus clientes. Una cantidad gigante de información que, hasta hace poco terminaba olvidada en discos duros, y que comprende desde el registro de las interacciones directas con la marca (por compras, cotizaciones y mensajes en redes sociales) hasta las preferencias para adquirir algún producto, requiriendo urgentemente de un análisis de datos.

Pero los tiempos han cambiado. Gracias al avance de la Inteligencia Artificial, las organizaciones ahora cuentan con soluciones de análisis de datos: plataformas que permiten identificar tendencias y determinar acciones personalizadas en tiempo real, a partir de los datos que genera cada persona. Con estas, por ejemplo, Netflix ‘sabe’ las películas que pueden gustarle a cada usuario, o un banco anticiparse a los productos que necesitarán sus clientes en diciembre.

Si bien estas soluciones parecen sacadas de obras de ciencia ficción, a partir de su popularización a través de la nube, cada vez más organizaciones de todos los tamaños y sectores las están utilizando. Para no ir muy lejos, un estudio elaborado por Dell Technologies y Forrester Consulting dice que el 65% de las organizaciones mexicanas considera que la recopilación y el análisis de datos cambió la forma en que hacen negocios durante los últimos tres años.

Entre otros beneficios, estas compañías han encontrado que el análisis de datos aumenta los ingresos, promueve el uso eficiente de la tecnología, ahorra tiempos operativos, incrementa la precisión para la toma de decisiones, ayuda a entender los patrones de comportamientos de los clientes, reduce riesgos y facilita la creación de estrategias comerciales eficaces.

análisis de datos

Ahora bien, utilizar plataformas para el análisis de datos e Inteligencia de Negocios no es tan sencillo, como contratar un servicio en la nube. Ante todo, las empresas deben comenzar a preparar y conectar la información que necesitarán para cumplir con los objetivos que se han propuesto.

Paralelamente, deben decidir las fuentes de los datos que piensan utilizar en sus análisis. Aquí siempre es recomendable buscar soluciones que ya estén listas para integrarse con todo tipo de formatos, bases de datos y aplicaciones -desde procesadores de texto y hojas de cálculo hasta soluciones para realizar encuestas-, para no tener que recurrir a costosas y demoradas consultorías externas.

Una vez entran en operación, las plataformas de analítica brindarán la posibilidad de hacer consultas en lenguaje cotidiano y conversacional («hazme una gráfica con las ventas del último trimestre en Guadalajara» o «muéstrame recomendaciones para nuestra operación»). Con esto, los usuarios no requieren de conocimientos profundos o técnicos en sistemas para utilizarlos: un tomador de decisiones solo debe saber qué necesita para que el sistema le conteste.   

Lo mejor es que, gracias a que ahora están en la nube, incluso las pequeñas y medianas empresas pueden utilizar estas soluciones, pues solo pagan por el número de usuario reales que las necesitarán.

La tecnología ha acelerado la preocupación de las empresas por mejorar su análisis de datos para incrementar la productividad. No hay que permitir que el temor a la transformación digital frene estas iniciativas que amplían los conocimientos y las posibilidades de los equipos de trabajo.

Por: Fernando Sotelo, Director de Experiencia del cliente en Zoho para América Latina.