Si nos alejamos de las visiones futuristas y nos enfocamos en aplicaciones reales de la Inteligencia Artificial (IA) en industrias como retail, salud, transporte o finanzas, veremos que sus beneficios son tangibles cuando su desarrollo está pensado a partir de la experiencia y necesidades de los usuarios. La clave es precisamente pensar cómo la IA puede mejorar la experiencia humana y, por ello, primero habría que preguntarnos ‘¿Por qué?’ antes de tratar de resolver el ‘Cómo’.
La consultora frog exploró las áreas en las que la IA tiene la capacidad de crear soluciones transformadoras y significativas para los usuarios, más allá de ser una tendencia tecnológica, ya que así se crean aplicaciones de Inteligencia Artificial que son más confiables, seguras, explicables, libres de sesgos y que representan los intereses de los usuarios humanos.
- 1. Realidad extendida y mezclada
Con la Inteligencia Artificial conectada a la Realidad Virtual se crean formatos de Realidad extendida y mezclada, haciendo posible que el usuario se vea inmerso en una realidad virtual o aumentada, ya sea con fines recreativos o para mejorar la eficiencia en un ambiente de trabajo.
- 2. Ambientes conectados
Se trata de crear espacios donde las interacciones digitales y físicas se fusionen y existan puntos de contacto que respondan sin problemas a las necesidades del usuario.
- 3. Zero UI
Aquí se busca que la UI (Interfaz de Usuario) se base en interacciones multimodales eficientes que combinen reconocimiento de voz, detección facial, retroalimentación háptica y detección del estado del ambiente.
- 4. Inteligencia combinada
Sabemos que la IA no puede reemplazar la intuición humana, por ello, integrarlos y combinarlos permite potencializar las fortalezas y disminuir las debilidades de ambos.
La consultora frog recalco la importancia que está cobrando la Inteligencia Artificial en el mundo de hoy en día e invita a dejar de lado los clichés para pensar cómo esta tecnología ayuda a solucionar problemas del día a día.