Uno de los mayores retos de la industria de la construcción es la correcta integración de la tecnología, tanto para la resolución de problemas en obras, cambios en el diseño con impacto directo en el costo final, ineficiencia en la comunicación entre los diferentes profesionales y áreas implicadas en el proyecto, así como en errores de cálculo de materiales y capital. En este escenario, la aplicación del modelado virtual en la construcción es una metodología que se pone a la vanguardia, logrando ir más allá del diseño de un plano o tener una proyección sobre una construcción en curso.
La importancia de contar con una herramienta que eficiente todos los procesos radica en que, entre el 40 y el 50% de los proyectos de construcción no se concluyen en tiempo, y el 90% de los proyectos superan sus costos del 20 al 80%, debido a diferentes factores, como, por ejemplo, la complejidad en la cadena de suministro, la falta de planeación táctica y operacional, falta de procesos, sistemas, herramientas, capacitación y de mecanismos de seguimiento.
Por ello, contar con una herramienta que responda a estos desafíos será primordial para responder de manera instantánea a cambios, modificaciones y cumplimiento con la obra.
La metodología Building Information Modeling (BIM) o modelado de la información para la edificación, permite entrelazar a todos los actores que confluyen en cualquier tipo de proyecto para tener su correcto funcionamiento, ejecución e incluso mantenimiento.
Es decir, BIM es una herramienta tecnológica colaborativa, en donde el principal objetivo es centralizar toda la información del proyecto en un modelo de información digital. La idea básica es poder modelar virtualmente cualquier construcción, desde un edificio, conjuntos habitacionales, centros comerciales de usos mixtos, hasta grandes aeropuertos.
En una fase inicial, el modelado BIM requiere ser alimentado con todos los datos del proyecto, permitiendo que el proceso de diseño se organice de manera estructurada y disciplinada al mantener el diseño, el modelo y la documentación de cada proyecto en el mismo archivo; en este sentido, es similar al proceso de planeación que se realiza con cualquier construcción. La gran diferencia es que hace algunos años se realizaba una cantidad infinita de planos para un proyecto de varios niveles, pero con este tipo de plataformas toda esa información se concentra en un solo espacio, traduciéndose en menor tiempo y un mejor análisis de costos y materiales que se ocupan.
No obstante, la implementación de este instrumento no es tan fácil como pudiera parecer, puesto que hoy en día convergemos en una época que opta por procedimientos estándares y convencionales, mientras que nuevas generaciones buscan soluciones innovadoras que aporten valor agregado. En el primer caso, para incitar al uso de BIM habría que establecer indicadores sobre los procesos que tratamos de mejorar. Del mismo modo, establecer donde están los desperdicios y calcular su dimensión e impacto.
Es decir, la implementación de BIM, aunque ha avanzado muy rápido, parece necesitar otra estructura desde la idea de un proyecto hasta su ejecución, con el objetivo de poder capitalizar todos los beneficios que ofrece esta tecnología.
Una vez identificadas las áreas de mejora y sus indicadores, el uso de otras herramientas como la metodología LEAN, ayudarán al proceso de implementación y obtención de los beneficios de BIM.
BIM actúa para coordinar los puntos de vista hacia el proyecto y el presupuesto asignado, materiales y, sobre todo, la reducción de los tiempos de entrega; si se llevan a cabo conforme al plan inicial, permite ser congruente con lo que se prometió al inicio de una obra. A largo plazo, tener un tiempo de entrega sin contratiempos por parte del desarrollador significa mayor confianza para la persona- compañía que requirió el servicio.
Como empresa proveedora de soluciones, Victaulic utiliza enfoques BIM avanzados como el escaneo 3D para el inicio de un proyecto y ha adoptado el uso de programas de realidad virtual para visualizar el desarrollo de una construcción. La incorporación de estos procesos y tecnologías BIM brinda oportunidades para identificar posibles complicaciones en el proceso o agilizar las eficiencias para obtener ganancias en el cronograma de construcción antes del inicio de esta, logrando resultados como 25% de aumento de eficiencia en la creación de modelos, ahorro de hasta 30% en el costo total de la obra, y un 60% de eficiencia en la preparación de fabricación.
BIM se ha vuelto una necesidad real al aportar un mayor grado de fiabilidad y precisión en la estimación de costes, plazos y resultado final, aproximando la digitalización a la construcción como uno de los cuatro ejes principales de la industria: industrialización, sostenibilidad y eficiencia energética.
Por Héctor Quezada, Director General de Victaulic en México.