Tras la riña suscitada el pasado 5 de marzo en el partido Querétaro vs Atlas, en el estadio Corregidora de Querétaro -que dejó un saldo de 26 personas lesionadas, 3 de éstas de gravedad- la Federación Mexicana de Futbol (Femexfut), los clubes y los dueños de los estadios se vieron obligados a implementar medidas urgentes que ayudaran a prevenir actos violentos, para garantizar la seguridad de aficionados que asisten a estos eventos para divertirse sanamente.
Así, establecieron un proceso de credencialización de los aficionados denominado Fan ID, con el que se están recabando datos biográficos y biométricos de los asistentes a estadios para generar una base que permita identificar a quienes realizan actos violentos a través del reconocimiento facial.
Sin embargo, esta iniciativa no ha sido bien recibida por organizaciones civiles y organismos como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), quienes han cuestionado la capacidad que podrían tener las autoridades deportivas para blindar la información y evitar una posible filtración de los datos.
Para Adolfo Loera, CEO de Biometría Aplicada, la FMF y los clubes de fútbol tienen tres grandes retos en la materia – garantizar la seguridad de los aficionados, respetar la privacidad de quienes acuden a los estadios a disfrutar de un partido y permitir una libre movilidad entre los diferentes recintos-, los cuales pueden ser resueltos sólo si se utiliza la tecnología adecuada.
“Recabar datos personales no sólo genera fricciones en la relación que tienen los clubes con sus aficionados, sino también conlleva riesgos y restringe la movilidad de los asistentes. Por ello, consideramos que la forma en que está estructurada hoy en día la Fan ID no va a ser sostenible en el tiempo e incluso puede generar implicaciones legales que harían que se desechara”, señaló el experto en identidades digitales.
“Ante ello, la contrapropuesta es utilizar técnicas de reconocimiento facial en tiempo real solo para agresores, es decir, desde el momento en que se ingresa al estadio, durante el evento y en la salida, para monitorear posibles connatos de violencia y contenerlas en el momento, así como asegurar la seguridad de las familias y aficionados. Con ello, estaríamos aplicando una tecnología poco intrusiva, que ha demostrado excelentes resultados en otras partes del mundo, y no se tendrán que almacenar los datos. Con ello se evitaría también la instalación de kioscos de reconocimiento, lo que genera filas y retrasos en los ingresos”, agregó.
La tecnología de biometría usada de este modo, permite hacer una identificación facial con hasta un 99% de precisión, independientemente de que la persona use gorras o lentes, o cambie su aspecto físico con una barba y bigote; incluso puede hacer identificaciones aunque los fans porten cubrebocas o alguna bufanda de su equipo.
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