La automatización es el futuro para la fuerza de trabajo digital. A nivel mundial, según Deloitte, el 74 % de las empresas utilizan la automatización para impulsar la eficiencia y sortear la convergencia de problemas, como las réplicas en curso de una pandemia mundial, la inflación descontrolada y las reglamentaciones cada vez más complejas. La mejor práctica es adoptar y desplegar trabajadores digitales para asociarse con los humanos, construyendo nuevos mercados y creando lugares de trabajo más saludables y felices. Estimaciones similares de Gartner prevén que la inteligencia artificial y la automatización tengan un valor de impacto global combinado de $15 billones de dólares para 2030.
¿Qué es un trabajador digital?
Los trabajadores digitales son bots de software inteligentes que automatizan los procesos de negocio cotidianos, como la entrada de datos, la facturación o las consultas del sistema. Combinan lo mejor de la tecnología moderna: Inteligencia Artificial (IA), Aprendizaje Automático, Automatización de Procesos Robóticos (RPA) e Inteligencia Visual. El concepto de trabajo digital no es nuevo. Muchos de nosotros hemos llegado a depender de Alexa, Siri u otros asistentes digitales de nivel de consumidor para responder preguntas, reproducir música o llamar a un servicio de automóviles. Con la automatización inteligente avanzando rápidamente, los trabajadores digitales también se están convirtiendo en una parte cada vez más normal de las experiencias laborales diarias de las personas.
Lo que depara el futuro para los trabajadores digitales
El aumento del «reclutamiento» de trabajadores digitales ofrece una amplia gama de beneficios operativos y también cambiará la forma en que trabajan los humanos. Esto es lo que puedo anticipar:
- Los trabajadores digitales ayudarán a crear nuevas oportunidades laborales: El futuro del trabajo no se trata de reemplazar a las personas con trabajadores digitales o robots. Más bien, la automatización empoderará a las personas para que alcancen su máximo potencial en un entorno de trabajo que les sirva mejor. Cuando la tecnología puede manejar procesos tediosos, abrumadores, laboriosos y costosos, las personas pueden aplicar sus conocimientos y habilidades a un trabajo más significativo y de valor agregado.
- La fuerza laboral se conectará y vinculará con sus contrapartes digitales: Los trabajadores del conocimiento dependerán de los trabajadores digitales como lo hacen con sus colegas humanos cuando colaboran en una tarea. Considere las relaciones de confianza que desarrollamos con los compañeros de trabajo a lo largo del tiempo. Nos asociamos, confiamos unos en otros y nos apoyamos cuando aumenta la presión o se desbordan las cargas de trabajo. La fuerza laboral comenzará a desarrollar actitudes y comportamientos similares hacia los trabajadores digitales, cuyo propósito es hacer la vida más fácil a las personas que los rodean.
- Los empleados crearán sus propias fuerzas de trabajo digitales: Las empresas deberán priorizar las oportunidades de mejora de las habilidades para las personas que quieran ayudar a contribuir a las iniciativas de automatización a través del desarrollo ciudadano, el aprendizaje profesional y las certificaciones que promuevan las competencias. Esto permitirá a los empleados construir sus propios bots. Los programas de actualización digital no solo crean una fuerza laboral mejor capacitada y más adaptable, sino que también pueden fomentar un entorno en el que se toman decisiones comerciales más inteligentes.
Las empresas tienen un imperativo comercial a corto plazo para transformarse para alcanzar los objetivos comerciales. Sin embargo, creo que el objetivo a largo plazo debería ser crear una mejor manera de trabajar. Las principales empresas del mundo tendrán éxito al reclutar, desarrollar y empoderar a los mejores talentos y apoyarán a esos humanos con contrapartes digitales. Esto se debe a que las personas no solo son más productivas cuando trabajan con trabajadores digitales; también son más felices.
Por Miguel Ángel Campos, Director de Automation Anywhere México.