Cómo usan los gobiernos la tecnología para combatir el COVID-19

A lo largo de la historia de la humanidad las epidemias y pandemias se han presentado afectando a gran parte de la población; sin embargo, en la batalla contra el COVID-19 la tecnología ha sido una gran aliada para detectar y combatir el nuevo virus. 

Desde que el COVID-19 dio inicio en la ciudad de Wuhan, China, el gobierno de ese país ha utilizado la tecnología a su favor. Desde robots desinfectantes y drones, hasta cascos equipados con tecnología térmica para medir la temperatura de sus ciudadanos. Al mismo tiempo, para evitar el contacto humano, se han desarrollado robots inteligentes que entregan paquetes de comida y medicamentos, así como drones para controlar el bienestar de la población a través de la telemedicina, es decir, recibir apoyo médico a distancia y realizar entregas de paquetería para evitar el contacto humano. 

Adicionalmente, a lo largo de todo el mundo se están ofreciendo incentivos económicos a startups tecnológicas para crear herramientas que contribuyan a mejorar la calidad de vida de las personas durante la pandemia, esfuerzo en el que están participando empresas como Amazon, Apple, Facebook, Google, IBM, Microsoft y Twitter. 

“Durante esta pandemia hemos sido testigos del uso de la tecnología para crear soluciones de diagnóstico que permiten identificar a los posibles enfermos, desde software que detecta los síntomas a través de imágenes topográficas computarizadas, hasta tecnología de reconocimiento facial, la Inteligencia Artificial se ha posicionado como un factor clave que, incluso, en este momento se está usando para acelerar el desarrollo de una posible vacuna que contribuya a frenar el contagio del virus”, mencionó Ricardo Pizzuto, fundador y director general de openBerry Foundation (oBF).

En Corea del Sur, por ejemplo, se logró contener el contagio gracias al reconocimiento facial, facilitando así la identificación de las personas que tuvieron contacto con algún enfermo, permitiendo anticipar su cuarentena y evitar la propagación del virus, al mismo tiempo que reducir los efectos en la economía.

Del otro lado del mundo, en Estados Unidos, empresas como Tesla, de Elon Musk, se dieron a la tarea de construir ventiladores para los hospitales, especialmente para el estado de Nueva York, que es uno de los más afectados.

En España y China, utilizaron drones para seguir a las personas que salen a la calle para preguntarles el motivo de su salida y, en caso de ser necesario, instarlos a regresar a casa; mientras que los vehículos aéreos están siendo utilizados para el transporte de productos de primera necesidad y así evitar el contacto entre personas. 

En México, por otra parte, se están utilizando chatbots vía SMS o páginas web para tener comunicación con la población sobre sus síntomas, saber si es necesario direccionarlos a una institución de salud dependiendo del cuadro que presenten. Pizzuto anotó que “estas herramientas también son de gran ayuda para evitar la mala información respecto al COVID-19.”

“Sin lugar a duda, la tecnología es un aliado incomparable en la lucha contra esta pandemia, por lo que a partir de ahora es altamente probable que los gobiernos designen una gran parte de su presupuesto para el desarrollo de tecnología médica para proteger a los ciudadanos”, añadió el directivo de oBF.