El efectivo sigue siendo la forma de pago más habitual entre mexicanos: Estudio

Minsait Payments presentó el  XII Informe de Tendencias de Medios de Pago, un estudio realizado con la colaboración de Analistas Financieros Internacionales (AFI) donde recolecta opiniones de más de 100 directivos y 7.200 internautas bancarizados de México, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Perú, República Dominicana, España, Italia, Portugal y Reino Unido. Entre los resultados de nuestro país se destaca que para el 92% de mexicanos el efectivo es la forma de pago más habitual, a pesar del impacto de la pandemia hacia la digitalización.

Desde hace un par de años, y como explica Jesús Álvarez, director de Minsait Payments en Caribe, Centro y Norte América, “la pandemia multiplicó el ritmo de crecimiento de los pagos digitales. Su uso se ha generalizado entre las generaciones más jóvenes, cuya elección del instrumento de pago varía en función del contexto de compra. En este sentido, comercios y establecimientos tienen que correr, porque no todos han adaptado sus medios de pago al comportamiento del comprador/pagador. Y esto puede tener un efecto disuasorio en el momento de compra”.

Desde el punto de vista del consumidor, los mexicanos han diversificado el tipo de entidad con que contrata servicios financieros y de pagos. El descenso de la multibancarización (mexicanos que operan con dos o más entidades) ha propiciado el surgimiento y crecimiento de nuevos operadores financieros fundamentalmente de las tarjetas de prepago. El 65% de los bancarizados ya posee una tarjeta de prepago de una entidad no financiera, concentrándose especialmente en retailers, marketplaces y plataformas de eCommerce. En la modalidad de débito, el 22% ya cuenta con una tarjeta de débito con estos nuevos agentes, y el 36% una tarjeta de crédito.

Por su parte, las entidades financieras siguen estando en el top-of-mind de los consumidores. Más del 90% de los bancarizados tiene servicios contratados con entidades financieras tradicionales y el 80% recurriría a ellos como primera opción a la hora de contratar nuevos servicios o productos financieros. Los neobancos van adquiriendo mayor relevancia con el 19% de la población mexicana utilizando sus servicios, todavía lejos de los valores de uso en Colombia (74%) y Brasil (70%).

El dinero en efectivo sigue siendo el medio preferido de los mexicanos

uso de efectivo en mexicanos

A pesar del impacto de la pandemia en el cambio de hábitos y, en particular, hacia la digitalización de los pagos cotidianos, el dinero en efectivo sigue siendo el medio de pago más habitual para el 92% de los mexicanos encuestados cuando se trata de compras o pagos presenciales.

Entre otros, por su universalidad, facilidad y rapidez de pago, el dinero en efectivo es el medio preferido para el 44% de los mexicanos; en segundo lugar, con un 33% la tarjeta; el 20% los pagos desde cuenta (incluyendo las transferencias inmediatas).

El alto uso de efectivo se debe, entre otras circunstancias, a su aceptación universal, ya que es aceptado por todas las personas y comercios. No obstante, se aprecia una disminución de su uso motivada por los cambios en los hábitos de compra, con el crecimiento de las compras online y la disminución del consumo presencial, y los cambios en los hábitos de pago hacia medios digitales. 

La tarjeta se consolida en las transacciones más innovadoras

Dada su aceptación por prácticamente todos los establecimientos, el uso de la tarjeta continúa siendo muy extensivo: el 91% de los mexicanos posee una tarjeta de débito, seguido del 60% que posee una tarjeta de crédito y el 35% de prepago. El dato novedoso es que, en México, el 49% de las tarjetas son virtuales, liderando la digitalización de tarjetas en Latinoamérica (34%).

Mientras las tarjetas consolidan su liderazgo, las billeteras digitales o soluciones de pago móvil ganan tracción conforme se generaliza el pago contactless en comercio físico y crece la modalidad de pago a través de las apps. En la actualidad, el 52% de los mexicanos ya ha pagado en la modalidad de pago vía app, seguido de los links de pago vía sms y el pago QR (33% en ambos) y acercando el dispositivo al terminal de cobro (23%).  A cinco años vista, más de la mitad de los agentes de la industria encuestados considera que el pago móvil será el preferido de los consumidores a la hora de realizar sus pagos cotidianos.

Una de las tendencias destacadas este año es cómo la tarjeta se consolida en las transacciones más innovadoras. El 60% de los agentes de la industria encuestados en el Informe de Minsait Payments coincide en que la oportunidad de crecimiento de los pagos con tarjeta se verá impulsada por neobancos y banca digital, que buscan dar soluciones a problemas específicos de los usuarios con el objetivo de mejorar su experiencia. Un ejemplo podría ser el de los viajeros que buscan transparencia en las tasas de intercambio o tarjetas multidivisa. 

Este crecimiento se verá reforzado por las plataformas de comercio electrónico y los marketplaces, con casos de uso como la emisión instantánea y a escala de tarjetas virtuales para el pago de múltiples proveedores y comercios asociados.

Otro impulso a las tarjetas vendrá de aquellas que permiten a los receptores de remesas acceder a su dinero de forma instantánea, pudiendo retirar efectivo en cajeros o realizar compras en comercios. También crecerán las tarjetas virtuales de un solo uso en modalidad Buy Now, Pay Later (BNPL), que permiten aplazar o fraccionar las compras.

Por el contrario, los pagos con tarjetas vinculadas a criptomonedas aún constituyen un fenómeno de bajo impacto.