Derivado de la desaceleración de la economía que existe hoy en día a nivel global, CleverTap analiza las dificultades que las startups de consumo digital están enfrentando durante las presentaciones de sus dispositivos innovadores, la serie de despidos en la industria tecnológica y el descenso de más del 50% en la financiación de capital de riesgo que afecta principalmente a las compañías de hardware.
CleverTap atribuye esta recesión a la intervención de diversos factores como la pandemia de COVID- 19 que impactó significativamente en las finanzas y el comportamiento del consumidor, que ahora prefiere realizar compras en línea, tener entretenimiento en el hogar y recibir sus alimentos en la puerta de su casa. Este cambio perjudicó las cadenas de suministro tanto en la fabricación como en la distribución de productos.
Otro factor que ha influido es la proliferación del comercio electrónico y la facilidad de iniciar un negocio en línea, generando una mayor competencia en el posicionamiento de la marca. Además de que los hábitos de los clientes se encuentran en constante evolución y las empresas deben adaptarse para seguir siendo relevantes.
CleverTap considera que algunos de los resultados provocados por esta situación son la reducción de la rentabilidad, en la que la demanda de los productos o servicios reduce e impide a su vez que el negocio alcance los ingresos logrados en años anteriores; el difícil al acceso al financiamiento y el aumento de la competencia por la diversidad de alternativas en precios bajos y productos baratos.
Ante esta problemática, los especialistas de CleverTap proponen estrategias para que las marcas de consumo digital puedan adaptarse a una economía cambiante:
- Hiperpersonalización de experiencias: conocer al consumidor a detalle para brindarle justo lo que requiere en el momento en que lo solicita.
- Retorno de Inversión (ROI): invertir en estrategias multicanal para asegurar la optimización del ROI y la retención de clientes.
- Diversidad en productos: gama infinita de productos y servicios para que sean seleccionados por los consumidores a partir de sus gustos, necesidades, características, entre otros.
- Programas de fidelización: demostrar el aprecio a los usuarios a través de descuentos e incentivos por su lealtad, que se base en un sistema de acumulación de puntos, niveles o pagos con beneficios a miembros de un club VIP.
- Responsabilidad social: valorar la sostenibilidad y las acciones en beneficio de la sociedad que opera.
Pese a la desaceleración latente, las marcas de consumo digital tienen muchas oportunidades para prosperar. Pueden requerir mayor esfuerzo y creatividad que en el pasado, sin embargo, la posibilidad de revaluar y adaptar sus caminos para obtener el éxito del engagement del cliente es posible.
Tan solo en México, Statista reportó que en el 2022 que el número de internautas mexicanos de e-commerce fue de alrededor de 64 millones, 10% más con respecto a la cantidad del año anterior y se espera que para el 2027 llegue a los 88 millones. Estimó que el 48% de la población adquiere bienes o servicios en línea y calcula que esta tendencia roce el 48% de penetración en 2025