La pandemia está teniendo un impacto profundo en la forma en que trabajamos; la disrupción por la que estamos atravesando ya se ve en una evidente fatiga por las reuniones virtuales, por lo que es necesario cambiar la forma en que laboramos.
El 58% de los empleados de oficina anticipan que trabajarán ocho o más días cada mes desde casa y con la expectativa de que 98% de las reuniones contarán con participantes remotos está surgiendo una nueva forma híbrida de trabajo.
Por eso empecemos por hacer una catarsis de lo que puede haber experimentado durante sus reuniones virtuales, como por ejemplo, no conocer la herramienta que utiliza para tener sesiones virtuales puede llevarlo a desesperarse y más aún si no la había utilizado antes, la interrupción del internet o de la corriente eléctrica lo cual es impredecible; y es probable que haya preparado bien su presentación pero al presentarla se quede sin conexión. Aunado a esto, detalles que tomamos por obvios como la silla, el escritorio y la iluminación en el área de trabajo y estar de manera sedentaria durante muchas horas sin tener un mobiliario de trabajo adecuado, le va a generar una fatiga adicional.
Además, la pérdida de audio y video que puede suceder por diferentes razones, como la cantidad de recursos disponibles de memoria y procesamiento en la computadora y el consumo de ancho de banda que ya no es suficiente por que ahora es compartido con la familia cuyo espacio compartido se puede traducir en una falta de privacidad en ciertos momentos del día o como generadores de ruido durante una junta importante, lo que se suma a las distintas causas de fatiga.
Ahora vamos a ponernos como ejercicio algo que nos permita recordar los beneficios del trabajo remoto: Para que esto tenga un impacto positivo en usted, visualicese en el espacio de trabajo en su casa haciendo sus tareas y trabajos habituales, desasociese de la imagen, como si fuera una persona que lo está viendo a usted mismo ¿Qué es lo que ve? Déjelo en pausa por un momento…
Salga de ese pensamiento donde se ve usted mismo y recuerde cómo era antes de que trabajara desde casa; muy contrastante ¿verdad? Algunos ejemplos de lo que vemos como beneficios de estar en casa son: la reducción en los tiempos de traslado, ya que ahora tiene productividad al momento, incluso puede pasar más tiempo con la familia, hacer ejercicio y aprovechar esos minutos e incluso horas que le representaba ir de su casa a la oficina.
Menor gasto por insumos de transporte, considerando la gasolina, el mantenimiento de su automóvil, pago de estacionamientos, o el gasto generado por el transporte público, son algo que hoy ya no está descontando de su ingreso y , el tiempo con la familia, lo que para algunas personas es su motivación principal para salir a trabajar y a veces resulta hasta complicado darse el espacio para hacer una llamada o mandar un mensaje; ahora están en el cuarto de a lado sonría y sienta la sensación que le genera.
Por consiguiente, para evitar la fatiga por trabajo virtual, en definitiva, habrá que sacar la mejor ventaja de:
- Herramientas colaborativas que le permitan trabajar a distancia sin comprometer la seguridad o la productividad de los empleados.
- Programas de adopción, que pueden o no ser generados por su misma empresa, hoy en día sí leyó este artículo en una plataforma digital, la ignorancia para usted es una opción no una condición limitante, ya que el conocimiento está en Internet.
- Utilizar el video para enriquecer su experiencia auditiva, visual y kinestésica durante las juntas y verá que poco a poco desarrollará habilidades diferentes que le permitirán ser más exitoso.
- Integre herramientas donde facilite e incentive la participación de los asistentes.
Decida cómo lo quiere ver, sin embargo, recuerde que siempre se ve el jardín más verde de lado del vecino, estamos viviendo lo que veíamos probablemente en el otro extremo de ese jardín, tenemos la oportunidad de crear un ambiente que haga mejorar nuestras experiencias, busquemos reconstruir desde este presente, de cualquier forma no hay marcha atrás…¡Evolucionemos hacia la adaptabilidad para la transformación!
Por: Omar Pelaez, TSA Collaboration en Cisco México.