Cadenas de mensajes de texto, videos, tweets, etcétera. En los últimos tiempos, el torrente de información y noticias sobre el Covid-19 copa la actualidad informativa. La incertidumbre en torno a la situación actual hace que al cabo del día recibamos miles de mensajes alertando de posibles riesgos, nuevos datos, consejos sobre cómo combatir el coronavirus, etc. cuya verosimilitud influye en la opinión de los usuarios. Sin embargo, Check Point alerta de que los cibercriminales aprovechan todo este caudal de comunicaciones para difundir fake news y generar así mayor confusión e incertidumbre, además de poder tener acceso a una gran cantidad de datos.
“En términos generales, pero mucho más en momentos como los que estamos viviendo, la información es un arma muy poderosa y crucial que puede marcar el devenir de la crisis global en la que nos encontramos inmersos”, señala Mario García, director general de Check Point para España y Portugal. “Los cibercriminales son conscientes de este hecho y de los daños que generan las conocidas fake news, por lo que aprovechan para lanzar campañas masivas de este tipo de amenaza virtual. Por tanto, para garantizar la seguridad y veracidad de la información tanto en el mundo virtual como el real, es fundamental ayudar a los usuarios a saber distinguir y evitar hacer caso de noticias falsas”, añade Mario García.
¿Cómo saber cuándo estamos ante una fake news?
Expertos de Check Point señalan las 5 preguntas clave que hay que hacerse para distinguir las fake news:
1 – ¿Quién me envía esto y por qué? Esta pregunta es fundamental, sobre todo en el caso de que la comunicación se produzca por correo electrónico. Los cibercriminales suelen suplantar la identidad de organizaciones o fuentes fiables en los mensajes que envían con el fin de ganarse la confianza del receptor.
Por este motivo, cuando recibamos cualquier tipo de notificación es vital comprobar si estamos suscritos a algún tipo de newsletter o cualquier otro tipo de servicio de comunicaciones emitido por dicha entidad, ya que, en caso contrario, es prácticamente imposible que puedan tener datos nuestros como el correo electrónico, por no decir que tampoco tendrían ningún motivo para contactar con nosotros.
2 – ¿Tiene faltas de ortografía o gramaticales? No cabe duda de que el factor del error humano en la redacción está muy presente y que, a la hora de escribir un texto, es muy sencillo cometer alguna falta de ortografía y no darse cuenta. Sin embargo, revisar la calidad del texto de la noticia que nos envían también nos aporta claves para saber si estamos ante un texto que proviene de una fuente de confianza o no.
En el caso de que a lo largo del contenido se repitan de forma recurrente errores de concordancia gramatical en términos de uso de género o en cuanto a la conjugación de los tiempos verbales, entonces es muy posible que nos encontremos ante un texto escrito en una lengua extranjera pero que ha sido traducido por medio de algún programa informático y no se ha comprobado correctamente.
3 – ¿El link que incluyen para que pinche es el verdadero? En muchas ocasiones, no se comparte la noticia en sí misma, sino que se adjunta un enlace que redirige al usuario hacia una determinada página web.
Ante esta situación, es fundamental comprobar la URL, ya que los cibercriminales tienden a crear webs de fake news que copian la imagen y formato de las páginas web de medios de comunicación, etc. En este sentido, en caso de duda, en la red también hay disponibles sites especiales que permiten a los usuarios verificar que las web que están visitando son de confianza y el tiempo que un determinado dominio lleva activo, ya que si se ha dado de alta hace poco, muy probablemente se trate de una web falsa creada para llevar a cabo actividades fraudulentas.
4 – ¿Utiliza fuentes contrastadas? Una de las bases de una noticia de confianza, sobre todo en el caso de que aporte cifras o datos, es utilizar fuentes que aporten credibilidad y sustento a la noticia. En internet hay millones de páginas webs de las que se puede sacar información, pero siempre es mucho más recomendable utilizar fuentes oficiales (por ejemplo, ahora con el caso del Covid-19, webs de instituciones públicas como el Ministerio de Sanidad u organizaciones como la OMS). En caso contrario, en el que las fuentes sean desconocidas y de dudosa procedencia, muy probablemente nos encontraremos antes una noticia falsa.
5 – ¿De verdad es una información exclusiva? No cabe duda de que los medios de comunicación, en ocasiones, cuentan con datos o fuentes a los que otros medios no tienen acceso. Sin embargo, si estamos ante una noticia que declara ser exclusiva, debemos sospechar, ya que en caso de que ningún otro medio de comunicación se haya hecho eco de esa información, puede implicar que estamos ante una fake news.
Para ello, es muy recomendable utilizar Google News, ya que al insertar palabras clave relacionadas con ese artículo, el software mostrará únicamente noticias relacionadas que provengan de fuentes verídicas. Si no existen resultados, entonces esa información no es de fiar.
“Los cibercriminales aprovechan estos momentos de desconcierto e incluso pánico generalizado para generar fake news con el objetivo de aumentar la incertidumbre y dificultar el acceso a información veraz. Por este motivo, es fundamental estar prevenidos ante la avalancha de noticias que recibimos cada día, ya que no todas son reales. Utilizar el sentido común, verificar las fuentes y la URL, así como comprobar que otros medios se hace eco de informaciones similares, son ciberconsejos simples que permiten evitar ser víctima de las noticias falsas”, concluye Mario García.