La ciberseguridad abarca todo lo que hacemos de manera digital y que en la actualidad forma parte de nuestra vida cotidiana. Todo lo que está conectado a Internet, está expuesto a ser atacado, por lo que las ciberamenazas representan un riesgo para todo lo que somos y hacemos. Hacer conciencia y estar preparados con especialistas en ciberseguridad es fundamental para mantener las empresas funcionando y nuestros clientes y empleados seguros.
La ciberseguridad va más allá de defender los sistemas. Si bien se encarga de proteger las redes, las aplicaciones, la información y las operaciones, es importante considerar al factor humano dentro de las estrategias de seguridad cibernética.
Un aspecto a destacar es que las organizaciones utilizan miles de datos para tomar decisiones estratégicas y aumentar el conocimiento de los perfiles de sus clientes. Toda esta información digitalizada y almacenada en servidores es el principal objetivo de los cibercriminales.
Por lo anterior, las empresas están realizando grandes esfuerzos para custodiar su información y la demanda de expertos y especialistas especialistas en ciberseguridad va en aumento.
Aumento de las ciberamenazas
De acuerdo con un estudio de la OEA y el BID, el crimen en línea ya supone, aproximadamente, la mitad de todos los delitos contra la propiedad que tienen lugar en el mundo.
De acuerdo con reportes de ESET, solo el 33% de las organizaciones en América Latina cuenta con un plan de continuidad del negocio. Alrededor de 86 millones de dólares es el costo promedio a nivel global de una brecha de datos para una organización y 280 días es el tiempo promedio que tarda una organización a nivel global para identificar y contener una brecha de datos. En América Latina, el tiempo promedio es de 328 días.
América Latina es una región en riesgo. Brasil, México, Argentina, Colombia, Perú y Chile concentran la mayoría de los ciberataques dirigidos a la región. En el caso de México, los negocios son los objetivos más vulnerados. Del total de los ciberataques dirigidos a empresas en la región, en lo que se ha contabilizado de 2020, México es el país con el segundo mayor volumen de ataques exitosos, solo superado por Brasil.
Las investigaciones indican que los ataques se han dirigido sobre todo al sector financiero y a grandes corporativos que han migrado o están migrando sus operaciones a ambientes digitales.
Se considera que la exposición de los corporativos mexicanos es consecuencia de una débil política de ciberseguridad a nivel país y una baja conciencia de la protección digital en usuarios y empresas.
De igual manera, se espera que en 2021 el tipo de ataque con mayor crecimiento en México, y en el mundo, será el secuestro de datos o ransomware y se espera que cada vez más se dirijan a infraestructuras críticas, como hospitales o universidades con redes científicas.
Necesidades del mercado
Por lo anterior, es importante enfatizar las necesidades que existen en el mercado acerca del tema de ciberseguridad. La región de América Latina y el Caribe aún no está suficientemente preparada para enfrentar los ataques que se producen en el ciberespacio. Únicamente 7 países de los 32 analizados por la OEA y el BID, en un reporte del 2020, cuentan con un plan de protección de su infraestructura crítica. Esto limita la capacidad de identificar ataques y responder oportunamente a los mismos.
La industria de la ciberseguridad se triplicará año tras año hasta 2022, sin embargo, la escasez de mano de obra sigue siendo de millones en todo el mundo. Uno de los fa
ctores que limita el progreso de nuestra región en materia de ciberseguridad es la ausencia de talento humano calificado. Al día de hoy, la brecha de profesionales en ciberseguridad se estima en 600.000 personas en la región.
Oportunidades del mercado
Pero este incremento de las ciberamenazas y las carencias que tienen algunas organizaciones en temas de seguridad informática, también representan una oportunidad interesante.
De acuerdo con analistas de IDC, para 2024 harán falta más de 10 millones de profesionales en ciberseguridad. Hoy en día, se estima que el 71% de las empresas en América Latina no encuentran perfiles expertos en ciberseguridad. Y es un hecho: la cantidad y la calidad de Hubs, Labs y unidades de ciberseguridad no son capaces de cubrir la demanda en el mercado.
La industria de la ciberseguridad crece cada año, ha tenido 0% de tasa de desempleo desde 2011 y se espera que crezca un 350% más en 2021, lo que significa:
- Más empleo. Con una tasa de contratación del 90%.
- Mejor pago. $ 7,500 USD al mes en promedio.
Las ofertas de trabajo para puestos de seguridad cibernética han crecido tres veces más rápido que otras oportunidades en la industria de TI. Especialmente en el mundo posterior a la pandemia, la ciberseguridad ha demostrado ser un trabajo estable con habilidades que en última instancia no solo consiguen un trabajo, sino que construyen toda una carrera profesional.
Entonces, ¿qué impide que las personas sigan esta carrera? Bueno, son las dos amenazas: la escasez de talento y la brecha de habilidades. Con abundantes oportunidades y compensaciones competitivas, lo único que se interpone en el camino de carreras lucrativas y preparadas para el futuro es la habilidad.
Por: Víctor Ruiz, fundador de SILIKN