Faurecia está llevando la Inteligencia Artificial a la conducción autónoma con soluciones que tienen la capacidad de monitorear la salud de los ocupantes del vehículo.
Como parte de la Cabina del Futuro, la empresa desarrolla sistemas con la capacidad de almacenar información sobre los hábitos, frecuencia cardíaca, temperatura cutánea y respiración del conductor y los pasajeros, además de ofrecer un análisis detallado de los datos recopilados, con la finalidad de detectar cualquier cambio o alteración en el estado de salud física y mental. En una situación de estrés, cansancio o mareos, el vehículo ofrecerá experiencias multisensoriales para relajar o refrescar a los ocupantes.
Este monitoreo constante se almacena en una nube para integrar y conectar diferentes interiores y características de los asientos, mejorando la experiencia a bordo. Además, los sistemas inteligentes del automóvil tienen la capacidad de ajustar los asientos, de acuerdo con el tamaño y el peso de los pasajeros.
Por otro lado, Faurecia agregará mecanismos integrados que le ayuden a garantizar la seguridad al volante, que van desde un cinturón de seguridad y el anclaje, que se ajustan al movimiento del cuerpo para que, independientemente de la posición, los pasajeros tengan el menor daño posible en caso de un accidente de tráfico.
La Cabina del Futuro de Faurecia continúa en desarrollo en búsqueda de crear un automóvil que ofrezca seguridad y comodidad al conducir, integrando movilidad con cámaras de asiento regulables, pantallas intuitivas de alta definición, vibración inteligente, iluminación regulable, sonido de alta calidad, para que los pasajeros perciban un sentido de bienestar y poder mejorar la experiencia de viaje.