En un año sin precedentes, la tecnología está redefiniendo la forma en la que consumimos, nos transportamos, interactuamos y nos comunicamos. Hoy, pedir nuestro platillo favorito, un taxi e incluso trabajar desde casa es posible gracias a los avances tecnológicos en el ecosistema digital: apps, videoconferencias, plataformas, smartphones, entre otras. Hemos digitalizado nuestro día con día a partir de un uso mayor de dispositivos. De hecho, durante 2019 el país alcanzó los 81 millones de internautas y unos 87 millones de usuarios de comunicaciones móviles, de los cuales 95 por ciento usan un celular inteligente, de acuerdo con datos del INEGI. Nos volvimos digitales y nos comunicamos inteligentemente. Pero, ¿qué ha pasado con este fenómeno en el tema específico de la seguridad pública en un país en el que nueve de cada diez usuarios se conectan desde un teléfono inteligente todos los días?
En principio, México es una nación compleja, con una cultura muy rica y milenaria y con una posición de liderazgo Latinoamericano en muchos aspectos, pero en donde de acuerdo con los datos oficiales más recientes, 7 de cada 10 ciudadanos perciben como inseguro el lugar en el que viven. Es en este gap donde la tecnología está ayudando a cambiar las cosas, a partir de soluciones basadas en la Nube, el Internet de las Cosas (IoT) y la geolocalización.
En julio de 2019, en alianza estratégica con Google y Amazon Web Services (AWS) comenzamos un programa para proveer el Servicio de Localización de Emergencias (ELS, por sus siglas en inglés), a través de una puerta de enlace a la nube AWS de alta seguridad, en tiempo real, que permite localizar de manera instantánea y precisa a un ciudadano que llama al 911 a través de su dispositivo Android. Única en su tipo, esta iniciativa parte de una necesidad: minimizar el tiempo de respuesta desde los Centros de Atención de Llamadas de Emergencias (CALLE) a los ciudadanos que se encuentran en situaciones de riesgo médico, de protección civil, violencia de género, incendio, seguridad personal y familiar y/o servicios públicos.
En una emergencia, cada segundo cuenta y la geolocalización —con el previo consentimiento del usuario— permite ubicar automáticamente el incidente como el primer y más crítico paso para acelerar la ayuda. Esos preciosos segundos o minutos disminuidos en responder a una emergencia pueden ser la diferencia entre la vida y la muerte. De hecho, con el ELS es posible acercar la ubicación de la persona en un radio de 3 metros en exteriores y 15 metros en interiores, mientras que sin esta tecnología ELS de Google, en el pasado muy reciente era de 3 kilómetros a la redonda! Además, el personal de los CALLEE 911 puede aprovechar las capacidades de videollamada, chat silencioso y mensajes de dos vías en tiempo real para contar con un panorama completo del incidente desde el celular de la persona.
En los últimos 12 meses con este tecnología ELS, los CALLE han procesado 1 millón 322 mil 994 llamadas de emergencia y efectuado más de 135 millones de geolocalizaciones automáticas y dinámicas en los 18 estados del país que ya cuentan con él, cambiando la manera en que las autoridades ofrecen servicios de emergencia inteligentes, seguros y gratuitos para el bienestar de las personas.
Durante la pandemia de COVID-19, en algunas regiones la geolocalización y la videollamada garantizó un mayor control de los posibles casos, reduciendo el riesgo de exposición, focalizando la atención en puntos críticos y minimizando la probable propagación del virus.
Sin duda, México y el mundo se encuentran en un momento paradigmático, en el que la vida como la conocíamos no volverá a ser igual, pero en el que las grandes necesidades como la atención a las emergencias ciudadanas, la seguridad y el combate a crisis sanitarias como la pandemia, son cubiertas optimizadamente de mejor manera con la aplicación estratégica de tecnología de punta de nueva generación, ofreciendo el futuro de la seguridad pública, hoy.
Por: Abelardo Tous-Mulkay, Director General de Carbyne México.