Los alcances de la Inteligencia Artificial (IA) cada día son mayores. Hoy en día diversas industrias aprovechan esta tecnología para agilizar el tiempo y la forma en la que desarrollan nuevos productos. Aprovechando que la IA es capaz de sintetizar grandes cantidades de información y miles de variantes, se crean metodologías que contribuyen a la mejora de un producto.
El desarrollo de nuevos productos basados en IA ha sido un proyecto ambicioso que tan sólo en 2019 impulsó una inversión de $16.5 mil millones de dólares a nivel mundial, según el reporte PwC/CB Insights MoneyTree Report, Q1 2020.
Desde la industria farmacéutica, de alimentos, software, y hasta el sector industrial usan la IA y el Machine Learning (ML) para mejorar sus procesos, permitiendo a estos sectores avanzar en sus investigaciones para desarrollar nuevos productos a pasos agigantados.
“La IA ha impulsado el desarrollo de nuevos productos a una gran velocidad. Basta con ver que hace algunas décadas los grandes descubrimientos aún se daban por casualidad, ahora con la Inteligencia Artificial tenemos mayor control de los datos, mayor capacidad de análisis y mayor precisión en la información. La Inteligencia Artificial ve lo que el ojo y el cerebro humano tardarían años. Sin duda ha sido un gran catalizador de los nuevos descubrimientos científicos”, señala Gustavo Parés, director de NDS Cognitive Labs.
En la actualidad se publican en promedio cerca de 2.5 millones de artículos científicos nuevos al año, pero no fue sino a partir del 2016 y la incorporación masiva de la IA en la investigación científica, que se generó cerca del 90% de toda la información que se tiene hoy en día, afirma Ken Mulvany, fundador de la empresa BenevolentAI.
Por ello, “la Inteligencia Artificial no sólo ofrece la posibilidad de descubrir y crear nuevos productos, sino también la ventaja de acortar significativamente el período de desarrollo, investigación y análisis de datos, a la par de que perfecciona continuamente sus modelos y predicciones, gracias al aprendizaje automatizado”, añade Gustavo Parés.
El empleo del futuro
Según un estudio de MMC Ventures, cada vez más empresas invertirán en puestos de trabajo relacionados con el desarrollo de productos con IA y ML, estos profesionales tienen un salario competitivo y la mitad de ellos han percibido aumentos hasta en un 20% en los últimos tres años. Y en el caso de Estados Unidos estas profesiones se han convertido en el principal campo emergente de empleo.
El uso de la IA es una tendencia que continuará y se perfeccionará en los próximos años, no sólo debido a los beneficios que brinda como ahorros en tiempo y costos, sino también por las ganancias que deja.
De acuerdo con el mismo estudio de MMC Ventures, el 14% de las empresas más avanzadas en el uso de IA y ML obtienen el 30% de sus ingresos anuales gracias a esta actividad.
¿En qué se ha usado la Inteligencia Artificial?
- Desarrollo de nuevos materiales. En abril de 2018, investigadores de la Universidad Northwestern utilizaron la IA para crear máquinas que desarrollaron un nuevo material de vidrio metálico a un ritmo 200 veces más rápido que el proceso tradicional de experimentación en un laboratorio. Este nuevo material es más resistente y liviano que el acero y se ha empleado en industrias como la de semiconductores y aeroespacial.
- Baterías. El Laboratorio Nacional de Aceleradores SLAC del Departamento de Energía de Estados Unidos, utilizó ML para desarrollar electrolitos mejorados que incrementan la vida útil de las baterías de litio. El uso de esta tecnología superó las predicciones de los investigadores, quienes ahora emplean el ML para desarrollar baterías más duraderas.
- Almacenamiento de energía. Toyota, a través del Instituto de Investigación de Toyota (TRI), ha invertido cerca de 35 millones de dólares y 4 años de investigación y desarrollo para aplicar la IA al diseño y descubrimiento de nuevos materiales que lleven a la creación de una batería de auto capaz de retener la carga de energía y almacenarla de manera más eficiente que las baterías convencionales.
- Filamentos para impresoras 3D. La unidad de Sensores y Materiales de los laboratorios HRL desarrolló gracias a la IA una nueva receta de polvo de aluminio y otros elementos para imprimir en 3D piezas metálicas para aviones de nueva generación.
- Farmacéutico. Miles de farmacéuticas alrededor del mundo incorporan la IA para el desarrollo y perfeccionamiento de nuevos medicamentos. Según el reporte Future of AI and Digital Healthcare, de The Financial Times, en los últimos 5 años se han invertido 1.5 millones de dólares en Estados Unidos para el desarrollo del sector biotecnológico mediante la IA. Además, en ese periodo 20% de las grandes compañías farmaceúticas que trabajaron en tratamientos contra el cáncer han utilizado la IA para procesar datos de pacientes que ayuden a mejorar sus medicamentos.
Igualmente, empresas como Novartis, Pzifer o Roche han incorporado la IA en sus investigaciones para el tratamiento de cáncer de mama y pulmón.
- Comida. Cerealto Siro Foods es una línea de alimentos desarrollados por IBM y la herramienta I+Radar con base en las opiniones y gustos de los consumidores, datos que fueron analizados mediante IA. Todas las características de estos productos corresponden a las necesidades reportadas por los clientes y su interés en adquirir alimentos altos en proteínas, con ingredientes naturales, aptos para vegetarianos y que puedan consumirse en cualquier momento del día, según reportaron las tendencias analizadas.
A pesar de estos grandes alcances, la IA se enfrenta a un reto: la información es limitada; no obstante, “entre más información se tenga y más se usen estas herramientas tendremos mayor cantidad de datos, lo que permitirá perfeccionar los modelos predictivos y el uso de la IA en múltiples áreas”, concluye Gustavo Parés, director de NDS Cognitive Labs.