El trabajo ha cambiado y también el entorno laboral. Hoy, el líder busca empoderar a su equipo y medir resultados, no si la persona llegó y se fue a tiempo. En esta década y más allá, el gran motor del crecimiento empresarial es la pasión, la creatividad y la capacidad del profesional para trabajar en equipos multidisciplinarios. Se están produciendo profundos cambios culturales para apoyar este salto. Esta revolución también exige un nuevo modelo de sedes corporativas: Edificios Inteligentes o Smart Buildings.
La plataforma de Smart Building utiliza infraestructura digitalizada y soluciones analíticas para optimizar el uso de un edificio y, al mismo tiempo, proporcionar a la fuerza laboral espacios más eficientes y productivos.
Para esto, el edificio recibe sensores y dispositivos IoT que comienzan a controlar funciones como el acceso a estacionamientos, temperatura, luminosidad y humedad de los diferentes espacios, la seguridad del acceso tanto físico como digital, y el bloqueo o desbloqueo de torniquetes. Para el administrador del edificio, el gran objetivo es optimizar los procesos y reducir los costos.
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Una encuesta realizada en 2018 por el Servicio Comunitario de Información sobre Investigación y Desarrollo de la UE (CORDIS) indica que el uso de soluciones de edificios inteligentes puede reducir los costos de mantenimiento de edificios en nueve veces. Logros como estos explican que, según un informe de MarketsandMarkets de 2019, se espera que este mercado tenga un valor de $108,000 millones de dólares en 2025. En Europa, uno de los mercados más avanzados en esta disciplina, se emplearon 5.8 millones de dispositivos IoT en 2016 para respaldar los procesos de Smart Buildings.
Aumento de la productividad
Las inversiones en Smart Buildings también están justificadas, ya que actúan como palanca de productividad para los profesionales que trabajan en estos edificios. Un estudio realizado por el US Green Building Council en 2014 basado en entrevistas con 3,000 profesionales indica que incluso pequeños ajustes en el entorno pueden acelerar la productividad de los equipos. Las mejoras en la ventilación y el control de la temperatura aumentan los resultados en 11%, mientras que un enfoque más favorable de la luz va más allá, alcanzando un aumento del 23% en la eficiencia.
La otra cara de esta situación se analiza a partir de los motivos de insatisfacción de los profesionales entrevistados para este estudio. El 29% dijo, por ejemplo, tomar descansos más largos del trabajo debido a las molestias causadas por las incómodas temperaturas. En cuanto a los resultados de estos problemas, la investigación muestra que hasta 13% de los proyectos pueden retrasarse debido al contexto ambiental. El informe “Global Impact of Biophilic Design in the Workplace”, elaborado en 2015 por la consultora de sostenibilidad Human Spaces a partir de 7,600 entrevistas con profesionales de 16 países, revela que 33% de este universo dijo rechazar propuestas profesionales de empresas instaladas en entornos insalubres.
Smart Building proporciona beneficios a los usuarios y administradores de edificios.
- Los profesionales pueden, desde aplicaciones que se ejecutan en sus teléfonos inteligentes, reservar bahías, encontrar salas de reuniones disponibles, explorar todas las áreas de la empresa, localizar visitantes y ajustar el clima y la iluminación.
- En la pandemia, el uso intensivo de biometría / reconocimiento facial también aumenta, reemplazando el contacto de una placa o un dedo con un lector digital. Incluso la apertura y el cierre de puertas ahora están controlados por sensores que liberan al empleado de cualquier contacto con superficies.
- Los visitantes pueden ingresar a un edificio, notificar automáticamente a sus anfitriones, navegar a su destino, usar una conexión Wi-Fi segura personalizada y conectarse a equipos AV a través de un sólo flujo de registro de acceso al edificio.
- La dirección del edificio y el equipo de seguridad pueden monitorear y optimizar las condiciones ambientales en tiempo real, afinando los sistemas del edificio para satisfacer mejor las necesidades de los ocupantes.
- Los gerentes de TI e ingenieros de redes pueden usar soluciones de monitoreo con capacidades de Inteligencia Artificial y Aprendizaje Automático para reducir los costos de implementación y operación de Smart Buildings. La integración de la analítica facilita la gestión de la red heterogénea y compleja repartida por todo el Edificio Inteligente.
Para controlar entornos y tecnologías tan diferentes como un calentador y torniquetes de acceso, entran en juego muchos más diversos protocolos. Los principales para controlar Internet de las Cosas (IoT) y las redes son SNMP (Simple Network Management Protocol), API REST y XML. Estos protocolos coexisten con NetFlow, FTP, WMI o HTTP. Los entornos de Smart Buildings también incluyen dispositivos IIoT (Industrial Internet of Things) con protocolos como Modbus TCP u OPC UA, específicos para obtener comunicación con dispositivos de aire acondicionado y sensores ambientales.
Un solo tablero gestiona una gran variedad de protocolos
La efectividad de los Smart Buildings depende de una gestión capaz de integrar y analizar esta infinidad de protocolos, creando puentes entre las tecnologías de TI y OT. Se recomienda que los datos de monitoreo de todos los tipos de protocolos se puedan ver en un solo tablero de control o dashboard. Dependiendo de la demanda del entorno, también es posible desarrollar tableros dirigidos a áreas específicas del Edificio Inteligente, desde el uso del estacionamiento hasta los controles de ascensores.
La mayoría de los dispositivos que se utilizan en el edificio inteligente tienen direcciones IP. Este protocolo de comunicación puede ser una puerta abierta a los ataques de hackers, que pueden «secuestrar» el edificio y las personas que trabajan en él. Por tanto, es fundamental integrar las plataformas de seguridad digital en las soluciones de monitoreo del entorno.
Smart Building es un concepto en expansión: en este mismo momento se están desarrollando nuevos sensores, expandiendo el control digitalizado sobre este entorno. Es fundamental contar con una plataforma de monitoreo abierta y en constante adaptación, para actuar de manera predictiva y preventiva para evitar fallas en el entorno.
Además de ofrecer una visión predictiva esencial para la continuidad de los servicios digitales del edificio, la plataforma de monitoreo multiprotocolo produce KPIs (Key Performance Indicators) que son críticos para optimizar el medio ambiente. El resultado de estas soluciones es un entorno muy bien gestionado que ofrece la mejor experiencia para los usuarios de edificios.
El enfoque de los Smart Buildings es el humano
Los edificios inteligentes abarcan varias ramas de actividad, incluidos edificios de oficinas, fábricas, centros comerciales, hospitales, campus académicos, estadios, aeropuertos, bases militares y edificios residenciales. El factor común a todos estos casos de uso es uno: utilizar la digitalización para proporcionar el mejor entorno para los seres humanos.
Las empresas que brindan a sus profesionales un entorno diseñado para hacer su jornada de trabajo más agradable y placentera son, hoy en día, las corporaciones más grandes del mundo. Es importante que México aproveche, en el corto y mediano plazo, el aumento de productividad y control que brindan los Smart Buildings.
Por Luis Arís, Gerente de Desarrollo de Negocios para Paessler Latinoamérica