Linux Foundation Europe anunció la constitución oficial de OpenWallet Foundation (OWF). Este nuevo esfuerzo colaborativo desarrollará software de código abierto para respaldar la interoperabilidad de una amplia gama de casos de uso de monederos, incluyendo la realización de pagos, la prueba de identidad, el almacenamiento de credenciales validadas para puestos de trabajo, educación, posición financiera y derechos a fin de favorecer la confianza en el futuro digital.
Entre los miembros inaugurales de primer orden que patrocinan la OWF se incluyen Accenture, Gen, Futurewei y Visa. Entre los miembros generales que patrocinan la fundación están American Express, Deutsche Telekom / T-Systems, esatus AG, Fynbos, Hopae, IAMX, IDnow, IndyKite, Intesi Group, Ping Identity, SmartMedia Technologies (SMT), Spruce y Swisscom.
Además, 20 importantes organizaciones sin ánimo de lucro y entidades académicas y gubernamentales se unieron a la fundación, entre ellas: Customer Commons, Decentralized Identity Foundation (DIF), Digital Identification and Authentication Council of Canada (DIACC), Digital Dollar Project, Digital Identity New Zealand (DINZ), Digital Identity and Data Sovereignty Association (DIDAS), DizmeID Foundation (DIZME), Hyperledger Foundation, Information Technologies ics and Telematics Institute / Centre for Research and Technology Hellas (CERTH/ITI), Johannes Kepler University Linz, ID2020, IDunion SCE, Mifos Initiative, MIT Connection Science, Modular Open Source Identity Platform (MOSIP), OpenID Foundation, Open Identity Exchange (OIX), Secure Identity Alliance (SIA), Universitat Rovira i Virgil y la Trust Over IP Foundation (ToIP).
La OpenWallet Foundation no publicará un monedero por sí misma ni ofrecerá credenciales o creará nuevas normas. Más bien, su motor de software de código abierto tiene como objetivo convertirse en el núcleo que otras organizaciones y empresas aprovechan para desarrollar sus propios monederos digitales. Los monederos buscarán paridad de características con los mejores disponibles e interoperabilidad con los principales proyectos transfronterizos.
“Los monederos son una infraestructura crítica para los pagos, para la identidad y para un acceso seguro. El código abierto, impulsado por la colaboración entre grandes y pequeñas empresas, organizaciones sin ánimo de lucro y responsables gubernamentales, es un gran modelo de infraestructura vital para las sociedades digitales que beneficia a todos”, declaró Daniel Goldscheider, fundador de OpenWallet Foundation. “Poniendo el código abierto en el núcleo de los monederos, como ya lo es para los navegadores web, cualquiera puede crear un monedero digital que funcione con otras personas y ofrecer a los consumidores la libertad de conservar su identidad y credenciales verificables y compartir datos relevantes cuando, donde y con quien elijan”.
OWF cuenta con un grupo de miembros muy consecuente y diverso, y subraya lo importante que es tener una base abierta para dar soporte a una amplia variedad de monederos digitales para garantizar la coherencia, la interoperabilidad y la portabilidad, al tiempo que se protege la privacidad del consumidor.
“El mundo necesita un lugar en el que almacenar activos digitales importantes y el trabajo de esta fundación tiene el potencial de redefinir el panorama de credenciales a escala mundial, creando a su vez experiencias digitales mucho mejores para personas de todas partes y nuevas oportunidades de mercado”, afirmó Gabriele Columbro, director general de Linux Foundation Europe.
OWF es el segundo proyecto albergado por Linux Foundation Europe. El Proyecto Sylva se sumó en noviembre de 2022 para crear un marco de software en la nube que facilite las telecomunicaciones de código abierto.
OpenWallet Foundation lanzó un nuevo informe, Por qué el mundo necesita un monedero digital de código abierto ahora mismo, en asociación con Linux Foundation Research. Este señala:
- Los monederos digitales son el método de pago líder mundial para el comercio electrónico y el comercio minorista en el punto de venta. En 2021, el valor de las transacciones de monedero digital llegó a los 15,9 billones de dólares.
- Existen cientos de monederos digitales, pero sufren de una serie de problemas, como la dependencia de proveedores, la ausencia de interoperabilidad, una seguridad cuestionable y capacidades limitadas.
- También hay nuevos monederos en marcha, pero sin una sincronización total, cada país u organización que expida credenciales podría convertirse en un jardín amurallado. Las identificaciones y monederos de otros lugares no funcionarían, lo que interrumpiría los viajes y la movilidad de estudiantes y trabajadores.
- El futuro incluirá múltiples monederos, por lo que necesitamos un motor de monedero de primera clase para garantizar que la interoperabilidad esté integrada.