La Inteligencia Artificial (IA) y el aprendizaje automático (machine learning) han irrumpido en todos los aspectos de la sociedad, transformando industrias y optimizando procesos. Sin embargo, el ámbito de la impartición de justicia en México y el mundo aún no ha experimentado un avance significativo. De acuerdo con SAS, en los últimos 10 años el país ha realizado inversiones inteligentes en tecnología para diversas áreas relacionadas con el sistema de justicia, las cuales podrían sentar las bases para avanzar a una nueva etapa tecnológica.
“La clave para implementar tecnologías de IA en el sistema de justicia de manera eficiente radica en dos principales aspectos: tener claro lo que se quiere logar y, con base en ello, generar un plan por etapas, en el cual cada etapa por si sola sea capaz de generar información de valor”, asegura Mario Ulloa, Advisory Business Development Specialist, Public Safety & National Security en SAS Latinoamérica.
Y es que, de acuerdo con el especialista uno de los grandes retos del sector tiene que ver con la calidad de los datos, ya que la mayoría de las denuncias y archivos aún no se han digitalizado y el llenado de nuevos casos se realiza de manera manual lo cual genera mayor cantidad de errores y omisiones.
“Las herramientas de IA, analítica y machine learning trabajan con base en los datos. Por ello, es de vital importancia depurarlos, clasificarlos y estandarizarlos, es decir darles calidad, ya que solo algunos de ellos nos aportan información útil en las averiguaciones. De acuerdo con nuestra experiencia, en los reportes de denuncia policial manuales, solo el 3% de los datos generan valor en las investigaciones”, puntualiza Ulloa.
La ejecución de tecnologías de IA en los sistemas de justicia permite agilizar y mejorar la eficiencia de procedimientos legales. Desde la automatización de tareas administrativas hasta el apoyo en la predicción de fallos judiciales y la implementación de políticas públicas. Actualmente, una de las aplicaciones más destacadas es la revisión automatizada de documentos legales, lo que reduce el tiempo necesario para analizar pruebas y argumentos.
“Para la resolución de casos e investigaciones existe una enorme cantidad de documentos que los jueces, abogados, policías e investigadores deben revisar. Las herramientas de IA permiten que estas revisiones sean más rápidas, ya que tienen la capacidad de procesar grandes cantidades de datos en minutos y cruzar silos de información, comparar y analizar históricos, etc. Sin omitir detalles. De acuerdo con el Criminal Justice Law Enforcement Automated Data Services de Carolina del Norte el estado ahorra anualmente aproximadamente $12 millones de dólares en horas hombre gracias a un mejor acceso a los datos y eficiencias en los procesos”, afirma el directivo.
Ética de la inteligencia artificia clave para combatir el sesgo algorítmico
A pesar de los avances, la implementación de la IA en la justicia no está exenta de desafíos. Uno de los principales problemas que enfrenta es el sesgo algorítmico, que puede llevar a decisiones injustas o discriminatorias.
Los algoritmos de IA aprenden a partir de datos históricos, lo que significa que, si esos datos contienen prejuicios o desigualdades, la IA puede perpetuarlos. Es por ello por lo que dentro de los equipos de IA en la impartición de justicia deben existir comités de ética y consejos de vigilancia. De igual manera, las organizaciones deben verificar que las herramientas de IA sean desarrolladas por compañías que apelen a la ética en este ámbito y generen constantemente planes y estrategias para una implementación de IA más ética.
A pesar de los desafíos, la IA ofrece oportunidades significativas en el sistema judicial mexicano. La agilización de procedimientos legales mediante la automatización puede reducir la congestión de los tribunales y brindar un acceso más rápido a la justicia. Además, la IA puede ser utilizada para analizar grandes cantidades de datos y patrones, lo que podría facilitar la detección de actividades criminales y la toma de decisiones más informadas por parte de los jueces.
“Con base en el análisis y cruce de datos, así como el comparativo en los históricos, las herramientas de IA podrían ayudar a detectar delincuentes que esté prófugos de la justicia. Pero también, podrían generar recomendaciones de sentencias o dictámenes para casos similares y sencillos, es claro que la sensibilidad y juicio de las personas no puede ser sustituida en su totalidad por un software, pero este puede otorgar opciones basadas en datos, en análisis de grandes cantidades de información que permitan a los jueces tomar decisiones más informadas y de manera más rápida”, comenta Mario.
Y es que la implementación de tecnologías de IA en los sistemas de justicia es una realidad que ya se observa en diferentes partes del mundo. De acuerdo con la compañía de análisis de datos países como Estados Unidos, Inglaterra, Australia y Nueva Zelanda son punta de lanza en estas tecnologías. Por otra parte, Japón, Singapur y Corea del Sur han realizado importantes inversiones en justicia y seguridad en los últimos años.
Mientras que en América, Canadá, Colombia, Chile y México han realizado inversiones en áreas aisladas que les permiten avanzar por etapas en este ámbito.