El interés de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPyMEs) por digitalizar sus procesos va en aumento. Hoy este tema es percibido como una obligación para hacer crecer los negocios y, de entre muchas opciones, los servicios en la Nube se perfilan como la mejor herramienta para acompañar a las empresas en el logro de sus objetivos, por lo cual podemos decir que este tipo de servicios llegó para quedarse. ¿Cómo lograr una migración a la nube exitosa?
De acuerdo con nuestro estudio “Digitalización de las PyMEs y el emprendimiento en México: hallazgos, retos y alcances en 2021”, de las 400 empresas que se encuestaron, 13% son “entusiastas digitales”; es decir, que toman sus decisiones basadas en datos a la medida de sus necesidades, además de que perciben a la implementación de tecnología como una estrategia.
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Además, el 14% de las compañías que participaron en la encuesta son negocios a los que clasificamos como “maduros” y se caracterizan por tener una transformación digital implementada en toda su estructura. Estos dos datos nos dan cuenta de que la digitalización ocupa ahora un interés primordial para las empresas.
De acuerdo con este estudio, el 84% de las PyMEs refirió que la digitalización les permitió adaptarse a los cambios que trajo la contingencia, siendo el área contable una de las que tuvo mayor beneficio.
Despejando mitos
Nuestra experiencia nos dice que las personas temen a aquello que no conocen; por esta razón nos encontramos con muchos negocios que ven a las soluciones en la Nube como una amenaza a la seguridad de su información. Sin embargo, lejos de lo anterior, este tipo de almacenamiento no es otra cosa que un servidor virtual al que se accede a través de Internet lo que permite que el software y las bases de datos se ejecuten desde la red sin necesidad de un dispositivo físico para su almacenamiento. Así la información de la compañía está guardada de forma segura ofreciendo movilidad e acceso inmediato.
Las ventajas
A medida que los dueños de las MiPyMEs se familiarizan con los servicios en la Nube, observan una reducción evidente de costos, pues la escalabilidad que se obtiene, en cuanto a almacenamiento y software, no implica una mayor inversión en infraestructura ni personal especializado para la instalación de nuevos componentes.
Además, este almacenamiento está disponible 24/7, ofreciendo la posibilidad de trabajar desde cualquier lugar y en cualquier momento, siempre y cuando se tenga una conexión a internet; al mismo tiempo que facilita el trabajo colaborativo, con lo cual se disminuyen los tiempos de inactividad e incrementando la productividad y eficiencia.
Por otra parte, es importante saber que la migración a la Nube brinda la oportunidad de tener la información de la empresa al día, manteniéndola accesible para ser consultada. En cuanto a la seguridad de los datos, cada vez que se genera un nuevo ingreso de datos, permite crear un respaldo de estos, con lo que se garantiza su integridad.
En suma, la migración a la Nube es un proceso al cual las MiPyMEs se deben de sumar para ser más competitivas, ágiles y encontrarse a la vanguardia de los cambios tecnológicos. Actualmente la oferta de productos y servicios en el mercado tecnológico están enfocados en las necesidades de las PyMEs y tienen el propósito de contribuir con su digitalización preparándolas para afrontar los retos de eficiencia que demanda su operación.
Por Pablo Riedel, Director de Desarrollo y Sistemas de Información de CONTPAQi.