El gran reto de la conectividad en la nueva normalidad del regreso a clases

Como todos sabemos, éste ha sido un año particular debido a la crisis sanitaria que aqueja a prácticamente todo el mundo y que ha obligado a los diferentes sectores industriales, gobiernos e individuos a tomar parte, ajustar agendas y adaptarse a la situación. El sector educación no es diferente y tendrá un regreso a clases diferente.

El sector educativo no es la excepción. De hecho, el fin de curso pasado debió concluirse en línea y se vieron suspendidas actividades presenciales y todo tipo de eventos previamente planificados, incluyendo exámenes de admisión, ceremonias de cierre, premiaciones, graduaciones y más.

Para el ciclo escolar que está por iniciar, si bien la incertidumbre aún permanece, hay algo que está claro: en cualquiera de los escenarios, sea que se regrese a las aulas, se opte por un esquema híbrido o haya que continuar con la educación 100% online, una óptima conectividad será crucial en esta “nueva normalidad” del regreso a clases.

Según una reciente investigación de Educación Futura, el 66.4% de los alumnos de educación media superior y superior tienen una deficiente conectividad a internet, además de que el subsistema de telesecundaria más experimentado en el uso de la TV educativa enfrenta problemas de acceso a internet, y el 58% de las 116 universidades e instituciones de educación superior públicas y privadas, reportan tener carencias en esta materia, con 55% de sus alumnos y maestros admitiendo falta de capacidades en el uso y manejo de plataformas tecnológicas.

La experiencia de los meses previos ha sido contundente en la necesidad de tomar de una vez por todas la ola de la transformación digital en el sector educativo.

Existen herramientas y caminos que lo hacen posible, a través de tecnologías para implementar, administrar y monitorear redes alámbricas e inalámbricas (ya sea on-premise o en la nube), que con soluciones para crear tanto el aprendizaje móvil y a distancia como el salón de clases digital, incluyendo todo lo que está en medio.

¿Cómo conformar una robusta infraestructura para un aprendizaje ininterrumpido?

Aruba considera que para un aprendizaje digital del futuro se necesita construir infraestructuras alámbricas e inalámbricas (WLAN) inteligentes; tener una estrategia de BYOD en este regreso a clases para estudiantes, catedráticos, administrativos e invitados; invertir en seguridad, y optar por una gestión de redes integrada para simplificar la tarea.

El regreso a clases en México será híbrido.

Por ahora, son 5 los pasos prioritarios que las escuelas deben asegurarse de dar para hacer frente a la situación actual. Aquí los enlistamos, incluyendo las tecnologías que los hacen posibles:

  1. Seguir permitiendo que profesores y personal trabajen desde casa. Es posible que se extienda el confinamiento unos meses más. Para ello, los Access Point remotos (RAP) llevan la red y políticas de seguridad hasta la ubicación de cada empleado, mientras los agentes de intranet virtual (VIA) permiten que sus equipos portátiles y demás dispositivos móviles se conecten a las redes de forma remota, segura, transparentemente para los usuarios.
  2. Aprovechar el poder de la nube. Ésta no sólo ha resultado ser valiosa para los usuarios, sino también para las áreas de TI, ya que brinda visibilidad, permitiéndoles administrar sitios remotamente. Mientras se imparten cursos y se ofrecen servicios online, la tecnología Aruba Central facilita la gestión de conexiones a la red.
  3. Prepararse para reinventar el aprendizaje en las instalaciones escolares. Las instituciones educativas necesitan una conectividad Wi-Fi y cableada segura, de grado empresarial y confiable como nunca antes. En el salón de clases –una vez que se retorne a ellos– la enseñanza en la era digital demandará el uso de cada vez más dispositivos móviles, por lo que expandir el uso de Wi-Fi más allá del salón de clases y los laboratorios (a jardines, áreas comunes, estacionamientos, entre otros) es importante, así como la gestión centralizada de VPNs y todo tipo de redes (cableadas, inalámbricas y extendidas).
  4. Garantizar el acceso protegido a datos confidenciales. Los administradores y catedráticos requieren tener acceso a información confidencial desde casa (para consultar y actualizar datos estudiantiles, hacer pagos, etcétera) como si estuvieran en los campus o instituciones educativas, y en este sentido tecnologías como RAP y VIA mencionadas arriba permiten a las áreas de TI de las escuelas garantizar las conexiones seguras.

De igual modo, también es crítico que las redes en las instalaciones del colegio estén protegidas de ciberataques como el ransomware y otras vulnerabilidades. Aruba ClearPass emplea control de accesos dinámico y basado en roles, así como seguridad reforzada a lo largo de las redes y para los equipos que se conecten a ellas, incluso desde casa.

  1. Ir más allá, con el IoT. En la batalla por la crisis sanitaria, el Internet de las Cosas es un gran aliado de las escuelas: cámaras infrarrojas que detectan fiebre y sensores de proximidad y ubicación que alertan el espacio entre individuos son dos claros ejemplos. La infraestructura de red es clave para entregar en este regreso a clases al personal adecuado los datos que generen estos dispositivos, al igual que el que puedan proporcionar wearables, mapas de calor corporal, aplicaciones de rastreo de contactos, etc.

Por: Everth Hernández, Director General de Aruba México, una empresa de Hewlett Packard Enterprise.