Una nueva tarjeta SIM más pequeña, llamada nano-SIM, permitirá liberar espacio para añadir más memoria y tener baterías de mayor duración, por lo que los fabricantes de teléfonos móviles y smartphones podrán fabricar dispositivos más delgados. Así al menos lo defiende la empresa alemana Giesecke & Devrient, creadora de estas nano-SIM.
Una nano-SIM mide aproximadamente 12 por 9 milímetros, un 30% más pequeña que la tarjeta SIM micro. El grosor de las tarjetas se ha reducido en un 15%, de acuerdo con Giesecke & Devrient. Esta nano-SIM es, aproximadamente, un 60% más pequeña que las tradicionales tarjetas SIM, utilizadas por la mayoría de los teléfonos en la actualidad.
Giesecke & Devrient espera que los primeros teléfonos en utilizar la nano-SIM podrían aparecer el próximo año. Gracias a los adaptadores, el formato de la tarjeta será compatible con versiones anteriores de las SIM.
La compañía ya ha enviado las primeras muestras a los operadores de redes móviles, con el fin de que las puedan probar. Se espera que la estandarización de las nano-SIM sea aprobada a través de ETSI (European Telecommunications Standards Institute) para finales de año.
Apple, que ya utiliza tarjetas micro-SIM, ha estado involucrada en el desarrollo de este nuevo formato. En mayo, la empresa presentó una propuesta de una tarjeta más pequeña. Según Carolina Milanesi, vicepresidenta de investigación de Gartner, los teléfonos inteligentes pueden hacer tantas cosas que cualquier terreno en el que se pueda hacer algo para ahorrar espacio es una buena noticia.
Por su parte, Malik Saadi, analista principal de Informa Telecoms & Media, considera que es sólo una cuestión de tiempo el que veamos SIM virtuales. Para los operadores, será una buena noticia, pero sólo a medias, ya que, según este experto, van a perder parte del control físico que la tarjeta SIM ofrece, pero al mismo tendrán nuevas oportunidades.