Hoy, más que nunca, podemos decir que el futuro del trabajo ya está aquí. Uno de los grandes aprendizajes que nos ha dejado la pandemia de COVID-19 es que las herramientas y estrategias antiguas no funcionan en el lugar de trabajo moderno. Inmersos en un esquema en que la colaboración es fundamental, la movilidad es un hecho y el trabajo a distancia está en ascenso, la tecnología se convierte en un aliado crítico para todo tipo y tamaño de organizaciones. Uno de los modelos que ha simplificado la migración a tareas digitales es el Bring Your Own Device (BYOD) o “Trae tu propio dispositivo”.
BYOD se trata una dinámica que ha permitido a las empresas flexibilizar los activos al permitir que los trabajadores utilicen sus equipos personales en el ámbito profesional.
Dicha práctica se ha extendido en los últimos años, catalizada particularmente por la masificación de los dispositivos móviles, al grado de que hoy en día existen 3.5 mil millones de usuarios de teléfonos inteligentes en el mundo.
Considerando este escenario, es indudable que, para que las organizaciones se transformen digitalmente en la próxima década del trabajo, deben proporcionar a todos los empleados (de todos los niveles) herramientas integradas que les ayuden a estar más conectados, a ser más móviles y productivos.
Si bien el BYOD es una alternativa atractiva para simplificar la transformación digital de startups, emprendedores y negocios en desarrollo, las organizaciones más grandes podrían tener ciertas objeciones de seguridad, privacidad y manejo de información fuera del entorno corporativo.
Para acotar estas necesidades, en Microsoft, nos ofrece los siguientes consejos y recursos para ayudar a navegar por los ambientes a distancia, permitiendo a las empresas de todos los tamaños desarrollar la capacidad digital que necesitan para enfrentar estos retos, extendiendo su compromiso con la confianza y la seguridad a todo lo que hacen y desarrollan, identificando tres puntos clave para la transformación de los negocios a ambientes de trabajo móviles:
- Habilite los equipos en cualquier lugar: Respalde la colaboración remota, sustente una sensación de conexión y permita que todos los dispositivos impulsen la productividad empresarial.
- Administre y proteja el acceso: Habilite el acceso seguro a los recursos y datos a través de dispositivos administrados y no administrados, garantizando a la vez que la infraestructura puede manejar cargas de trabajo elevadas.
- Ajuste y automatice rápidamente: Adáptese rápidamente al potenciar su talento actual para compilar aplicaciones y flujos de trabajo, o bien personalice e implemente soluciones prediseñadas para lograr una innovación rápida en todas partes.
Es así como, de cara a la implementación del BYOD como una práctica cotidiana, la tecnología permite a las organizaciones centrarse en optimizar la productividad, en lugar de preocuparse por los posibles riesgos que un ecosistema diverso de dispositivos podría implicar.
Microsoft nos ofrece la solución de gestión Endpoint Manager, que ayuda a los departamentos de TI a proporcionar a los usuarios el acceso que necesitan en todos sus dispositivos, al tiempo que mantiene actualizados y protegidos esos dispositivos.