Mediante una nueva solución es posible convertir el alumbrado público en sitios 5G en apenas 15 minutos, con una huella de carbono cero, impulsando de manera eficiente la experiencia 5G en entornos urbanos.
¿Has notado que, de pronto, hay nuevos postes con cajas extrañas y cables colgados en algunas calles? Probablemente se traten de sitios 5G. Estos puntos de acceso ayudan a llevar datos móviles a un área localizada, potenciando conexiones indispensables desde una videoconferencia hasta la transmisión de tu deporte favorito.
Con capacidades en constante crecimiento y un cambio considerable en las tendencias de conectividad en el hogar, es de esperar que el consumo de datos y la demanda de conexiones de alta velocidad hayan aumentado en los últimos años. Para mantener el paso, es necesaria una expansión y mejoras continuas de la red, lo cual conlleva a tener más sitios celulares 5G en los lugares donde nuestros clientes viven, trabajan y se divierten.
Uno de los desafíos más importantes que enfrentan los operadores al implementar una nueva infraestructura de red móvil es el tiempo que se necesita para el proceso de adquisición de sitios, diseños de ingeniería y obtención de permisos: y todo esto es previo a la construcción. Agregar nuevas ubicaciones 5G puede demorar entre 12 y 18 meses en promedio, por lo cual es momento de generar soluciones creativas.
Empujar las opciones tradicionales sobre cómo se despliega 5G es precisamente lo que inspiró la pregunta y la idea: “¿Por qué no conectar antenas 5G al alumbrado público?” ATT&T se contactó con Ericsson y así nació el concepto de Ericsson Street Radio 4402.
Sitios 5G casi invisibles
La antena Ericsson Street Radio se puede implementar globalmente conectándose a las alumbrado público existente, que utilicen un conector estandarizado de la Asociación Nacional de Fabricantes Eléctricos (NEMA por sus siglas en inglés). Es prácticamente invisible desde el nivel de la calle, ya que el dispositivo se encuentra justo encima de la protección de la luminaria junto a la luz como tal, con lo cual se mimetiza con la infraestructura existente. Estas antenas buscan remplazar los cables largos y las cajas grandes y voluminosas, mejorando la estética. Adicionalmente, en muchos casos, la instalación se puede completar rápidamente, transformando una luminaria en un sitio 5G de banda baja o media en apenas 15 minutos.
Las luminarias también son el punto de implementación perfecto para satisfacer las necesidades de densificación de la infraestructura de la red porque suelen tener entre 8 y 10 metros de altura, 50 metros de separación entre cada una, y una fuente de energía ya existente, además están muy cerca de la fibra.
Al hacer uso de la infraestructura existente, esta solución reduce costos, agiliza la aprobación y los permisos del sitio y acelera la instalación. Estas antenas también tienen sensores inteligentes que permiten detectar fallas en las luminarias en caso de tormenta, apagón u otro evento disruptivo. Esto ayuda a evaluar rápidamente los daños y enviar equipos para reparaciones o alertar al proveedor de energía del problema.
Debido a que esta solución utiliza la infraestructura existente, podría desempeñar un papel fundamental para ayudar a llevar 5G a áreas desatendidas.
Aunque la solución está pensada en un inicio para la red AT&T, otros operadores podrán utilizar la tecnología en el futuro, lo que beneficiará aún más a toda la industria.
Por: Gordon Mansfield, Vicepresidente de Acceso a la Movilidad y Arquitectura en AT&T.