La pandemia ha abierto una caja de Pandora de fraude global. Enfrentados a una avalancha interminable de estafas, los profesionales antifraude han incrementado de manera significativa el uso de analítica, de acuerdo con el último estudio de tecnología antifraude (anti-fraud technology study) realizado por la Asociación de Examinadores de Fraude Certificados (Association of Certified Fraud Examiners ACFE) y SAS.
Basado en las respuestas de la encuesta de casi 900 miembros de la ACFE en todo el mundo, el Informe de evaluación comparativa de tecnología antifraude de 2022 (2022 Anti-Fraud Technology Benchmarking Report) muestra cómo las organizaciones de todos los sectores utilizan la tecnología para combatir el fraude de la cual destacan las siguientes respuestas:
- Más del 40% de los encuestados informaron haber acelerado significativamente (14%) o levemente (29%) su uso de analítica de datos debido a la pandemia de COVID.
- La mayoría (60%) espera que sus presupuestos de tecnología antifraude crezcan en los próximos dos años.
- El análisis avanzado encabezó la lista de inversiones, en particular la inteligencia artificial (IA) y el machine learning (citado por el 26 % de los encuestados), seguido de predictivos de analítica/modelado (22%).
«Al navegar por el panorama empresarial forjado por la pandemia, hemos visto un aumento en los informes de fraude, una tendencia que no esperamos que desacelere en el corto plazo», dijo Bruce Dorris, J.D., CFE, CPA, presidente y director ejecutivo de ACFE. «Para mantenerse a la vanguardia no solo del mayor volumen de fraudes, sino también de las nuevas tendencias, es fundamental que las organizaciones sean flexibles y proactivas en la adopción de nuevas herramientas y procesos antifraude. Este informe sirve como un recurso valioso para los profesionales antifraude. para aprender qué tipos de tecnología están usando sus pares, o planean usar, y cómo estas tecnologías han impactado el éxito de sus iniciativas de prevención y detección de fraude”.
Datos por industria, región y más
El informe 2022 es el resultado de una iniciativa de investigación mundial bianual lanzada por ACFE y SAS en 2019. Como complemento de esta segunda edición del informe, el panel en línea de SAS ofrece herramientas de visualización de datos que permiten a los usuarios examinar los hallazgos por industria, región geográfica y tamaño de la empresa. Los encuestados representan 23 industrias, principalmente del gobierno y la administración pública (22%) así como banca servicios financieros (20%). Las organizaciones varían en tamaño desde menos de 100 empleados hasta más de 10.000 y están ubicadas en todo el mundo.
Por industria destacan los siguientes aspectos:
- Analytics es una herramienta indispensable para la detección de fraudes. Cuando se les preguntó sobre su uso de analíticos, casi todos los participantes de la encuesta indicaron que el uso de analítica de datos para la organización fue benéfico para ayudarlos a aumentar el volumen de transacciones revisadas o casos sospechosos de fraude identificados (99%); la oportunidad de su detección de anomalías (98%); su eficiencia en la automatización de tareas que consumen mucho tiempo (98%); y su precisión general en la reducción de las tasas de falsos positivos (97%).
- Los consorcios de intercambio de datos están cobrando impulso. Las fuentes internas de datos estructurados siguen siendo el quid de las iniciativas de análisis antifraude de la mayoría de las organizaciones (citadas por el 80% de los encuestados), pero muchas también están aprovechando una variedad de fuentes de datos externas, incluidos los registros públicos (41%), las fuerzas del orden público o listas de vigilancia de gobierno (31%), redes sociales (29%), otros datos de terceros (25%) y datos de dispositivos conectados (25%). Además, el 34% de los encuestados informaron que contribuyen a consorcios de intercambio de datos, y otro 24% indicó que, si bien actualmente no contribuyen, estarían dispuestos a hacerlo en el futuro.
- Las organizaciones están utilizando una variedad de tecnologías emergentes para combatir el fraude. El informe destaca el uso creciente de tecnologías como la biometría física y del comportamiento, el análisis de visión por computadora, la automatización de procesos robóticos (RPA), blockchain y la realidad virtual y aumentada. El uso actual de estas tecnologías oscila entre el 7% (realidad virtual/aumentada) y el 34% (biometría física) de las organizaciones encuestadas. Entre los encuestados de organizaciones que no usan una tecnología emergente en particular, el 13% (realidad virtual/aumentada) y el 19% (RPA) esperan implementarla en los próximos uno o dos años.
«De manera rotunda, los profesionales antifraude encuestados dijeron que la tecnología analítica los están ayudando a identificar más fraudes de manera más rápida y precisa», dijo el coautor del estudio, Andi McNeal, CFE, CPA, director de investigación de ACFE. “Técnicas probadas en el tiempo, como el informe de excepciones y la detección de anomalías, siguen siendo los pilares, sin embargo, los crecientes presupuestos tecnológicos y el salto del 150% en la adopción de IA previsto para los próximos dos años indican que las organizaciones no se están durmiendo en sus laureles. El panorama podría ser diferente cuando volvamos a encuestar en 2023”.
“Aunque la proliferación de canales digitales y en línea ha aumentado los riesgos y ha creado nuevas y lucrativas vías para la explotación delictiva, hay un lado positivo”, dijo Stu Bradley, vicepresidente sénior de Fraud and Security Intelligence en SAS. “Estos canales permiten a las organizaciones capturar grandes cantidades de datos que pueden integrarse para monitorear mejor las tendencias y, en última instancia, adoptar una postura más preventiva contra las amenazas que cambian rápidamente”.